Hola chicas, buenos días.
¿Qué tal habéis pasado las fiestas? Por aquí bien, disfrutando en familia de las últimas noches del año.
Y preparándonos ya para Fin de Año, que esto se está acabando.
Pero bueno, vamos a lo que vamos.
Tengo muchas cositas que enseñaros. Vamos con una nueva entrega de la colección High School, tejida mientras espero a mi hija a las puertas del instituto.
En esta ocasión, ya sabéis que llevan nombres de pelis, lo he llamado "Cien años de soledad", una película-documental del año 2018. José Diaz se recluye en su cabaña en el Parque Natural de Redes (Asturias) durante un largo periodo de cien días, siendo autosuficiente y desconectándose absolutamente del mundo real y sus avances. No tendrá electricidad, movil, televisión, ordenador ni reloj... Solo el hombre con la naturaleza.
Elegí este nombre por su dueña, Soledad y por lo grande que es, no es un chal, es un señor mantón.
Está tejido con lana Caricias Oslo, una lana gordita y con unas hebritas casi imperceptibles a la cámara, pero que le dan un toque juvenil.
Soledad eligió este tono hueso, que combina con todo.
También eligió el punto, sencillo, punto alto y punto de red.
Y aquí el resultado final, un mantón con flecos que abriga muchísimo. Esta lana es ideal para tejer prendas abrigadas y suaves. Oslo destaca por su calidez, suavidad y el efecto jaspeado que produce al tejerla, además, incluye lino en su composición, lo que le aporta a la prenda de una caída única.
Su dueña está encantada, asi que yo, feliz.
Buen Martes.