De nuevo es noticia la Fundación Santa María la Real de Aguilar de Campoo por su intervención en varias iglesias de Zamora, algunas concluídas, como la que se ha llevado a cabo en la iglesia de Sejas de Sanabria y, otras, como la de Fermoselle o el Campillo, pendientes de actuación este mismo año en el marco del Plan Románico Atlántico.
El director del Patrimonio de la Junta de Castilla y León se ha mostrado satisfecho y lo ha resumido bien en una frase que destacaban hace unos días los medios regionales: «Proyectos como el Plan de Intervención Románico Atlántico y otros similares están contribuyendo a que Castilla y León se consolide como una Comunidad pionera en investigación e innovación en torno a la gestión y conservación del Patrimonio».
Durante los últimos meses, después de compartir en el rincón de facebook una imagen nocturna de la colegiata de San Salvador; después de admirarla de arriba a abajo, desde el prao concejo, desde el "otero", desde "las estradas", por detrás, por delante; después de verla fotografiada en catálogos y blogs particulares, me rindo ante la impresión que causa a todo el mundo; la misma o parecida impresión que nos causa a nosotros cada día que pasamos ante ella, por la importancia que todos los cronistas aseguran que tuvo en los primeros tiempos, y por la atracción y el sentimiento que ahora despierta en todos los que vienen a conocerla.
Pero lo que seduce en primer término es su esbelta espadaña, compuesta de tres cuerpos con remate triangular y doble hueco de campanas. Para la web de Arteguías, su fachada es lo más fotogénico del aspecto exterior y podría ser “la más bella espadaña del románico español”. Tampoco escatiman elogios los juicios que hacen de todo su conjunto. “Quienes consideran a este estilo como un arte horizontal y sin ánimo de verticalidad han de entrar en la iglesia para comprobar cómo hasta una modesta construcción pequeña y rural puede contar con una cabecera de estilizadas líneas ascendentes“. “El equilibrio y armonía que contagia este ábside es verdaderamente sugerente”.
Después de tanta admiración y tanto boato, me gustaría que la Fundación Santa María la Real, intervenga, dentro de lo posible, en la promoción y el mantenimiento de esta colegiata.
Imagen: Interior de la Colegiata de San Salvador. Imagen Wikipedia