“Ateneo Politécnico”, colegio de barrio
El “Ateneo Politécnico” era un colegio de barrio. Estaba en el barrio madrileño de la Prosperidad. Se fundó en 1927 y su responsable fue Juan Marciano Barbero Matos, profesor de Geografía e Historia de Enseñanza Media de Instituto Nacional. El Ateneo ocupaba la manzana de las calles Suero de Quiñones, Luis Vives, Vinaroz y Pechuán.
Pasado medio siglo el proyecto de su escuela se convirtió en quimera y la ilusión quedó enterrada. En 1977, su desalojo y derribo supuso el final de un símbolo para la Prosperidad. Su nombre todavía resuena en el barrio.
El colegio, que abrió en 1927 en un bajo de la actual plaza del Sagrado Corazón (entonces Plaza Moret), se instaló en 1931 en una antigua finca de finales del siglo XIX “Villa Elena”, que perteneció a los Duques de Sevilla, con amplio terreno y un hotelito de ladrillo y estilo neomudéjar situado en un extremo, de dos alturas, semisótano, mirador, numerosos balcones y una buhardilla en el remate de las cubiertas. También había añadidas algunas construcciones auxiliares y posteriormente, en la década de los sesenta, se construyó un módulo nuevo en forma de ele y tres alturas cuyo diseño era estrictamente escolar con entrada por la calle de Vinaroz 11.
Juan Marciano Barbero Matos, el fundador
Juan Marciano Barbero Matos nacido en Medina del Campo en el año 1897 era licenciado en Filosofía y Letras y fue profesor de Geografía e Historia de instituto, puesto del que solicitó excedencia. Fue excedente voluntario desde 1946 hasta, al menos, 1956.
Hasta 1927 trabajó de Oficial de Correos en Valladolid, fecha en la que abrió el colegio del barrio de la Prosperidad. Con el tiempo también fue profesor del Colegio de Huérfanos de Correos y catedrático de Geografía e Historia del Instituto Lope de Vega de Madrid. En ese mismo 1927 ingresó en la Sociedad Geográfica Nacional.
Su caracter aperturista, favorable a la innovación o a la transigencia ideológica, política, religiosa, tal como define el diccionario de la RAE al aperturismo, motivó que después de la sublevación militar de 1936 fuera sancionado por el nuevo gobierno, impidiéndole impartir su magisterio en ningún centro público. Tal separación se hacía cuando las autoridades recelaban de la posible influencia ideológica que el maestro pudiera ejercer sobre los alumnos o bien a causa de su metodología educativa. La inhabilitación podia ser parcial, temporal o total. Para el profesor Juan Marciano Barbero Matos la sanción, según se desprende de su trayectoria, parece que fue temporal, a pesar de haberse significado a favor de las clases populares. Es probable que por causa de esta separación obligada J. Marciano Barbero se dedicara con especial empeño a su escuela.
En una nota publicada en agosto de 1936, ya iniciada la guerra civil, J. Marciano Barbero Matos dirigía una carta al director general de Primera Enseñanza, en la que le decía que tras la sorpresa de la sedición militar ofrecía el colegio para instalar en él una guardería infantil para hijos de milicianos, de la que él se haría cargo para que pudieran desde ese momento inscribirse los niños hijos de milicianos de uno y otro sexo. ( Ver El Liberal, 6 de agosto de 1936. Pág. 14)
Cancha del Estudiantes
El Colegio “Ateneo Politécnico” contaba a finales de los años 40 con dos canchas de baloncesto con dimensiones profesionales reglamentarias. En el periodo de 1948-49 el colegio prestó sus instalaciones a un equipo de Segunda Regional de Madrid de la Federación Castellana para que entrenase y jugara sus partidos locales. El equipo, procedente del Instituto “Ramiro de Maeztu“, a falta de un campo reglamentario para jugar la liga se inscribió con el nombre de “Estudiantes” y allí jugó su primera temporada con ese nombre. (VER Segunda Regional de Madrid. 4º.)
“Ateneo Politécnico”, centro cultural
A partir de 1970 el colegio ya no tenía una actividad regular y cerró en septiembre de 1974, reconvirtiéndose en un centro cultural, dirigido por uno de los hijos de Marciano, Alejandro Barbero, de 54 años.
En el local había una guardería a cargo de tres psicólogas y una puericultora. Además de la biblioteca y de la hemeroteca, también se crearon la galería de arte “El Saco”, dos laboratorios de fotografía y un estudio de pintura, así como la adaptación de las instalaciones deportivas ya existentes, a partir de sus canchas de baloncesto. En el colegio también ensayaban grupos de teatro y bandas de música. Además, se crearon un centro de minusválidos y otro de ancianos, inexistentes hasta el momento en el barrio.
En 1976 moría Marciano Barbero a los 79 años de edad. En ese momento, el centro ya pertenecía a los herederos, a los hijos del matrimonio fundador Marciano y su mujer Laura Rodríguez, también maestra, profesora del Ateneo e impulsora del proyecto.
A pesar de que el colegio había sido declarado de interés social en 1957, lo que obligaba a seguir impartiendo enseñanza durante treinta años, al menos hasta 1988, en 1975 los hijos de los dueños acordaron su venta y posterior derribo. Todos menos uno: Alejandro Barbero.
Venta del “Ateneo Politécnico”
Alejandro Barbero, había emprendido acciones legales ante los tribunales contra la postura de sus hermanos de vender y demoler el colegio sin su consentimiento y falsificando su firma. En un intento de acercar posturas, planteó en última instancia retirar las denuncias, a cambio de que la inmobiliaria Fedeloz que se hizo con la propiedad se comprometiera a construir sobre el solar raso un complejo cultural para el barrio de la Prosperidad y, a su vez, que el Ayuntamiento se ofreciera a comprar el complejo nuevo que pedía.
Sin embargo el proceso de derribo del Ateneo Politécnico fue avalado por los tribunales que decidieron la procedencia de la demolición. (El País, 4 de marzo de 1977)
Protestas populares
A lo largo de 1976 la Asociación de Vecinos de Chamartín se manifestó en la plaza de la Prosperidad (plaza del mercado) reclamando la continuidad del Ateneo Politécnico. Consideraban que era la única oferta cultural del barrio y que ante la falta de alternativas no era légitimo privar a los vecinos del único espacio que cumplía esas funciones. Las protestas fueron continuas y se completaron con la recogida de firmas y un encierro en el colegio, al que siguió una huelga de hambre contra la especulacón y el derribo del Ateneo.
La prensa se hizo eco del problema y tituló :”VECINOS DE CHAMARTIN, CONTRA LA DEMOLICIÓN DEL POLITÉCNICO” (ABC. Viernes 18 DE Noviembre de 1976. Pag. 29.)
Desalojo y derribo
El 13 de noviembre de 1976 Alejandro Barbero se enfrentó a las las excavadoras para evitar que destruyeran una parte de los archivos, ficheros y material docente acumulados en el centro desde 1927. Operarios de la empresa encargada de la demolción, derribos Aurelio Prudencio, ayudaron a Barbero a rescatar la cuarta parte de los 20.000 kilos de material didáctico que permanecía en el sótano del Ateneo Politécnico. Láminas, mapas, cuadros sinópticos y genealógicos, fueron recogidos y depositados en el jardín del colegio mientras las obras de demolición quedaban interrumpidas.
El desalojo fue violento. A las 4.30 del 15 de enero de 1977, trece coches de la Policía Armada y algunos más de la Policía Municipal desplegaron a sus números que actuaron contundentemente contra los más de quinientos vecinos que se manifestaban para impedir el desalojo del colegio.
Mientras tanto, otros efectivos accedieron al local y desalojaron a las 150 personas que permanecian en el interior en huelga de hambre. El director Alejandro Barbero fue detenido y acusado de insultar a la autoridad y de incitar a la violencia. (Diario 16, 17 de enero de 1977)
Referencias.-
J. Marciano Barbero Matos
Análisis Gramatical. Biblioteca del Ateneo Politécnico. Madrid, 1931.
J. Marciano Barbero Matos
Gramatica española Síntesis. Madrid, 1939
El director del Ateneo Politécnico salvó su archivo de la demolición (El País, 4 mar 1977)
(1948-49) EN CAMPO PRESTADO (Movistarestudiantes.com/1948-1960/)