Ayer, Colombia volvió a votar SÍ a la Paz pero NO a los maltrechos Acuerdos de Paz cuando Iván Duque obtuvo 7.562.148 de votos, sobre el millón más que los que en 2016 rechazaron los Acuerdos recién firmados y que obligaron al gobierno Santos a darles un apresurado make-up y negociar algunas modificaciones (las que la guerrilla le aceptó) para no acabar fracasando totalmente.He estado leyendo algunas opiniones que auguran un «reñido» ballotage. Es bueno hacer números y memoria. Duque sacó 39,14% (le faltan 10,86%; las encuestas le daban entre 32,9 y 37,9, salió mejor) y su contendor 25,08 (le faltan 24,92; estaba entre 15,7 y 21,6, también mejor); el resto sacó 23,73 (Fajardo), 7,27 (Vargas Llera) y 2,06 (De la Calle). Petro necesita todo el trasvase de Fajardo (algo imposible) y aún “rasparle” a los otros. No hablemos de gobernabilidad: los congresistas de Petro son residuales en número.En los ballotages de 2014, el ganador creció 25% y en las de 2010, 23%. Valgan las memorias.
Revista Opinión
Ayer, Colombia volvió a votar SÍ a la Paz pero NO a los maltrechos Acuerdos de Paz cuando Iván Duque obtuvo 7.562.148 de votos, sobre el millón más que los que en 2016 rechazaron los Acuerdos recién firmados y que obligaron al gobierno Santos a darles un apresurado make-up y negociar algunas modificaciones (las que la guerrilla le aceptó) para no acabar fracasando totalmente.He estado leyendo algunas opiniones que auguran un «reñido» ballotage. Es bueno hacer números y memoria. Duque sacó 39,14% (le faltan 10,86%; las encuestas le daban entre 32,9 y 37,9, salió mejor) y su contendor 25,08 (le faltan 24,92; estaba entre 15,7 y 21,6, también mejor); el resto sacó 23,73 (Fajardo), 7,27 (Vargas Llera) y 2,06 (De la Calle). Petro necesita todo el trasvase de Fajardo (algo imposible) y aún “rasparle” a los otros. No hablemos de gobernabilidad: los congresistas de Petro son residuales en número.En los ballotages de 2014, el ganador creció 25% y en las de 2010, 23%. Valgan las memorias.