El Gobierno colombiano pidió a la Unión Europea que la relación con América Latina sea más equilibrada, con programas de cooperación que respondan a las necesidades reales de la región y no solo a agendas impuestas desde Europa.
Un llamado a relaciones más simétricas
Durante los encuentros recientes con delegaciones europeas, Colombia insistió en que la cooperación debe dejar de ser vertical. La propuesta es que los proyectos incluyan transferencia de tecnología, fortalecimiento institucional y apoyo a la transición energética, pero definidos junto con los países latinoamericanos.
Según la Cancillería, el país ya no solo quiere ser receptor de recursos, sino aliado estratégico en temas como cambio climático, migración, seguridad y economía verde.
Prioridades para la región
Entre los puntos planteados están la financiación de energías limpias, infraestructura sostenible y programas para jóvenes. Colombia recordó que América Latina afronta brechas de desigualdad y de conectividad que requieren soluciones conjuntas.
También se planteó revisar los mecanismos de cooperación para que sean más ágiles, con menos burocracia y con impactos medibles en los territorios.
Lo que viene
En los próximos meses se prevén nuevos espacios birregionales en los que Colombia buscará que la UE mantenga los recursos de cooperación y que se abran líneas específicas para el régimen de lluvias, la protección de la Amazonía y la seguridad alimentaria.
Colombia recalcó que la cooperación solo será efectiva si se diseña “con” América Latina y no únicamente “para” América Latina.
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