Colombia , hacia unas presidenciales polarizadas por la paz

Colombia, hacia unas presidenciales polarizadas por la paz

El proceso de paz en Colombia ha dividido al país, como se vio en el plebiscito de octubre de 2016, y va a polarizar la campaña para las elecciones presidenciales de 2018.
Todo indica que la idea que empieza a prevalecer es la de llegar a conformar dos grandes bloques: uno a favor del proceso de paz y otro en contra. Esa división condenaría al actual vicepresidente, Germán Vargas Lleras, a una peligrosa tierra de nadie.
Pero formar esas dos grandes coaliciones es un proceso muy complejo: lo que no parece descartable es que la precampaña y la campaña vayan a sacar a la luz las fuertes divisiones que separan a la clase política y al país en cuanto a tema del proceso de paz.
Dos bloques frente a frente
El primero en pedir que se forme una gran coalición con vistas a las elecciones presidenciales de 2018 en apoyo al proceso de paz ha sido Humberto de la Calle.
El que fuera jefe de la delegación del Gobierno que negoció los acuerdos de paz con las Farc planteó esta idea como reacción a unas declaraciones del senador del Centro Democrático (uribismo), José Obdulio Gaviria, quien aseguró que, si su partido gana la presidencia modificará los acuerdos de paz.
En declaraciones al diario El Tiempo, De la Calle llamó a que “todos los amigos del proceso tenemos que ponernos en guardia. La amenaza es seria. En lo personal, creo que hay que volver a salir con toda fuerza a defender lo obtenido. No nos van a quitar la paz. No lo podemos permitir. Ahora sí que es necesaria una coalición amplia, para que de aquí al 2018 nos movilicemos en defensa del acuerdo y de su implementación genuina.
Una coalición que De la Calle, quien se perfila como posible candidato presidencial, ve como transversal, más allá de los liberales y de la izquierda.
“Después de oír a José Obdulio Gaviria, yo estoy dispuesto a llevar a cabo la tarea que me corresponda en un esquema de coalición con un liderazgo colectivo. Toca movilizarse. Con mayor razón cuando las Farc están cumpliendo en general. Yo he cancelado toda idea de un descanso y quiero impulsar la tarea con las demás personas que defiendan el hecho histórico de la terminación del conflicto. Veo necesario unir fuerzas de cara al 2018″, afirma De la Calle.
La idea de De la Calle es compleja de llevar a acabo porque no solo supone que el Partido Liberal y el Partido de la U acuerden llevar un mismo candidato a sino que el exnegociador ve en esa alianza a figuras como el independiente Sergio Fajardo, Clara López del izquierdista Polo y Claudia López de los Verdes.

Enfrente, entre los contrarios al proceso se situaría el uribista Centro Democrático y el Partido Conservador con el objetivo de llevar a cabo cambios profundos al proceso de paz.
El senador uribista José Obdulio Gaviria ya ha anunciado que “todo lo que se refiera al acuerdo y esté reglado a la Ley 418 (Orden Público) tiene vigencia permanente y ninguna fuerza política lo pone en entredicho. Por ejemplo, la desmovilización, eso nadie lo puede poner en entredicho; la concentración, que es anterior a la desmovilización; los beneficios de una amnistía amplia y generosa a los delitos políticos, eso nadie lo pone en entredicho. Pero pretender que una comisión de verificación cogobierne Colombia durante 12 años, pretender la impunidad absoluta y la soberbia de tener que aceptar guerrilleros incursos en delitos de lesa humanidad simple y llanamente porque fue la voluntad de Timochenko y Santos, eso no tiene ninguna estabilidad jurídica. 
Que no nos venga a repetir De la Calle las argucias de Santos de que vamos a entrar en una guerra urbana, eso es carreta. Estamos hablando simplemente de una institucionalidad que ellos ponen patas arriba”.
De todas formas la conformación de la alianza entre uribistas y conservadores no es sencilla. Ambos tienen como objetivo llevar a un presidenciable.
El exprocurador Alejandro Ordóñez y de la exministra Marta Lucía Ramírez son los más fuertes aspirantes dentro de los “godos” a la primera magistratura del Estado pero el senador Hernán Andrade quien ostenta la presidencia del Directorio Nacional Conservador prefiere seguir aliado de Santos.
Vargas Lleras aislado
Y por su fuera poco fuera de estas combinaciones se encuentra Germán Vargas Lleras a quien parece que nadie quiera.
El actual vicepresidente y líder de cambio Radical se encuentra con el rechazo de la oposición (los uribistas) para quienes siempre ha sido un escudero de Juan Manuel Santos.
José Obdulio Gaviria lo explicó muy claramente: “Siento que la mayoría de su partido (Cambio Radical) es sumamente dócil frente a Santos y frente a las FARC, en cuanto a la alianza creada para imponernos mediante el fast track las normas inauditas que están trayéndonos”.
“Eso lo tendría que responder Vargas Lleras. Simplemente he notado que su partido apoyó y votó con fervor por el Sí, en consecuencia no está en nuestra coalición, que es mayoritaria. Le tocaría hacer un acto de contrición y pagar una penitencia política por haber cometido los errores que cometió cuando fue o silencioso, o solidario, o actor de un proceso que el país ve con espanto: el de convertir a las FARC, una organización terrorista de la peor catadura, en actor político en la sociedad colombiana”, concluyío Gaviria.
Los partidos que respaldan el proceso de paz y a Santos no perdonan a Vargas Lleras su tibieza a la hora de apoyar al presidente.
De la Calle ha llegado a señalar que “hasta ahora el doctor Vargas Lleras lo que ha mostrado es una gran indiferencia con el proceso de paz. Por eso hay que insistir en que la coalición para defender la paz tiene que ser coherente y no una repartija electoral mecánica para ganar el poder. Se trata de una cosa seria para garantizar que el desarrollo de los acuerdos, que significan cambios para Colombia, se cumpla”.
El Partido Liberal no parece contemplar el no tener candidato y ve como posibles a Humberto de la Calle, el ministro Juan Fernando Cristo, Luis Fernando Velasco, Viviane Morales, Juan Manuel Galán y Édison Delgado. Pero nunca Vargas Lleras.
Ya el líder liberal, Horacio Serpa, descalificó al vicepresidente cuando dijo: “Si hubiese habido, que no lo hubo, algo contra el Presidente, pues la fórmula era él. Hubo poca solidaridad del Vicepresidente con el Presidente”.
 Rogelio Núñez via @infolatam
 
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