Las decoraciones luminosas de este pino piñonero son en realidad estrellas de la constelación Scorpius y el tenue resplandor de la Vía Láctea central.
Captada en junio desde el borde norte del Gran Cañón, la fotografía muestra un primer plano de las agujas de la rama de un pino contra las estrellas distantes y desenfocadas cuya luz impregna unos discos de colores. Como es sabido, la temperatura determina el color de una estrella. La mayoría de estas estrellas fuera de foco de Scorpius presentan un color predominantemente azul, ya que sus temperaturas superficiales son mucho más altas que las del Sol. En el corazón del escorpión está la estrella gigante Antares, más fría y grande que el Sol y claramente más roja en esta escena. En las vistas telescópicas bien enfocadas, el disco blanquecino de la parte superior derecha sería reconocible de inmediato: es Saturno, el gigante de gas anillado, que refleja la luz del Sol.
Imagen astronómica del día gracias a observatorio.info
Relacionado