Fuente ¿Cuántas veces hemos escuchado decir que el tiempo pasa muy rápido o frases como "necesito que el día tenga 48 horas en lugar de 24", entre muchas otras? Pues déjame decirte que el tiempo no pasa más rápido que hace 100 años y que un día con 48 horas sería antinatura y perjudicial para nuestra salud. Entonces ¿Qué ha cambiado? Pues que estamos ansiosas y estresadas porque llevamos un ritmo de vida muy acelerado, queremos realizar muchas tareas y actividades a la vez, corremos arriba y abajo, tenemos abarrotada nuestra agenda, a veces nos quedamos hasta sin aliento y entonces sentimos que el mundo nos va a caer encima y que un gran cansansio de apodera de nosotras y por si eso fuera poco además de tener el estado de ánimo bajo, nuestra piel nos delata con su apariencia grisácea, apagada y deshidrata. Así que vamos a darle a nuestro cuerpo, nuestra mente y a nuestra piel un respiro con unos consejos para combatir el estrés. ¿Te vienes conmigo para conocerlos?
1. Levántate cuando suena el despertador. Esos 5 minutitos más que luego se convierten en 10 ó en 15, no son nada bueno para comenzar el día con buen pie. Primero porque en ese tiempo ya no estamos teniendo un sueño reparador y segundo lo único que estamos haciendo es retrasar lo "inevitable" que es lavantarnos de la cama para comenzar un día nuevo. Si te levantas a la hora estipulada tendrás tiempo de ducharte, arreglarte y desayunar correctamente para no tener salir con prisas por los dichosos minutitos más.
2. La música, tu gran aliada. Desde que su creación hace siglos, la música tiene un efecto muy positivo en los seres humanos, el cual se ve reflejado en muchos aspectos de nuestras vidas. Al escuchar música conseguimos que los vasos sanguíneos se dilaten por lo que la sangre circula mejor y el resultado es que nos relajamos y conseguimos desconectar de toda esa larga lista de tareas que tenemos pendiente de ejecutar.
3. Apúntate a natación. Además de ser uno de los deportes más completos porque ejercitas todos tu cuerpo, para nadar necesitas aprender a respirar de forma correcta. Si respiras bien, tu cerebo se oxigena mucho mejor y como resultado notas más energía, pero sin nervios ni estrés, sino que relajada.
4. Haz listas para todo. Aunque tengas muy buena memoria, no eres una máquina que registra aboslutamente todo lo que pasa, así que la recomendación es que apuntes todo en tu agenda, en una libreta, en el móvil, en el Outlook de tu oredenador o donde te sea más práctico comprobar las cosas pendientes que tienes por hacer. De esta manera te será mucho más fácil organizar tu tiempo sin agobios, ni despistes.
5. No te preocupes, ocúpate. Muchas veces caemos en el error de pensar en todas las cosas que tenemos que hacer y entonces nos agobiamos. Sin darnos cuenta, vamos posponiendo nuestras taeras y el estrés va en aumento. Así que, empieza a realizar de una a una tus tareas y entonces te podas relajar. Es pocas palabrás organiza tu día a día.
6. Realiza alguna actividad física. Si tu tiempo te lo permite, procura realizar alguna actividad física como andar, correr, aeróbicos, baile, lo que te apetezca. Cuando mueves tu cuerpo liberas "endorfinas" que son las hormonas de la felicidad, que hacen que te sientas más tranquila y relajada. Además si realizas algún tipo de ejercicio también conseguirás no tener que recurrir a los dulces o golosinas para sentirte "mejor" y por tanto no subirás de peso.
7. Prueba a hacer meditación. Unos minutos del día son más que suficientes para que cierres los ojos y aproveches para organizar tu mente y las tareas que tienes realizar, para dar gracias por un día más de vida y por las cosas positivas que tienes a tu alrededor. Esto te ayudará a entrenar tu mente para cuando lleguen los momentos de entrés puedas mantenerte serena. No estaría de más que tal como te lo comenté en el post Cómo trabajar de forma rápida y eficiente, aproveches también para hacer un análisis de tu estado emocional, ya que las emocionas ocupan horas valiosas de nuestro tiempo y hacen que nuestro nivel de estés aumente.
8. Sé ordenada. Esta recomendación parece obvia, pero a veces nos olvidamos de ella. Sin embargo está totalmente demostrado que si te rodeas de un ambiente limpio y ordenado, el estrés disminuye considerablemente.
9. Duerme cuando tu cuerpo te lo indique. La naturaleza es sabia y nuestro cuerpo nos indica el momento en el que ya no puede más y necesita descansar. Así que, aunque no hayas terminado todas las tareas que te habías marcado, es recomendable que las dejes para otro momento y te vayas a la cama a descansar. Al día siguiente, estarás fresca y descansada pero sobre todo le habrás evitado a tu cuerpo y a tu mente un estrés innecesario.
Todos estamos expuestos al estrés, así que espero que los tips de hoy te sean de utilidad para tu vida diaria, pero sobre todo que te animes a aplicarlos. Te aseguro que notarás una diferencia entre el antes y el después de de ponerlos en práctica.
Gracias por tu visita de hoy y por los minutos de tu tiempo que dedicas a leerme y a dejar un comentario. ¡Espero que acabes de tener una muy buena semana1.
Y tú ¿tienes algún tip que quieras compartir conmigo y las lectoras para combatir el estrés?
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