Revista Salud y Bienestar

Comedores Nocturnos

Por Bocadoslight @bocadoslight

El síndrome de comer por la noche (en inglés Night Eating Syndrome, NES) se caracteriza por falta de apetito por la mañana, comer en exceso por las noches levantándose para placar el apetito, y puede causar grandes estragos en la vida de la persona y dañar su salud. Quienes sufren de este trastorno comen por lo menos el 25% de la cantidad de comida diaria después de la cena, y suelen levantarse entre 1 y 3 veces cada noche.

Los expertos estiman que entre 1,1 y 1,5% de la población (del 6 al 16% de pacientes en programa de pérdida de peso y del 8 al 42% de los pacientes con cirugía bariatrica) experimentan NES. La prevalencia para ser similar entre géneros siendo los hombres un poco más propensos a padecer de este síndrome.

Posibles causas

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Tomografías realizadas en pacientes con NES evidencian una elevación significativa de los transportadores de serotonina. Esto conlleva un decrecimiento de transmisión de la serotonina que debilita los ritmos circadianos y la saciedad. Además, en personas con niveles elevados de transportadores de serotonina contribuyen a la depresión, la ansiedad, la hostilidad y el estrés. Estas emociones negativas se unen  al sentimiento de culpa y de vergüenza, que van relacionados con estos patrones alimentarios. Se ha detectado que el síndrome comienza con periodos donde el paciente se encuentra con niveles elevados de estrés. El NES no siempre es reconocido a tiempo por los profesionales de la salud; muchas veces los síntomas y signos son confundidos por otras condiciones o identificados como malos hábitos alimentarios.

Síntomas de NES

  • No sentir hambre en la mañana:

Las personas con NES no tienen apetito en las mañanas y puedes llegar sin comida alguna hasta la hora del almuerzo.

  • Comer de más en las noches:

En contraste con la falta de apetito a lo largo del día, las personas con NES se sienten muy hambrientas por las noches y tienden a sobre comer. Este estado se diferencia de los atracones.

  • Dificultad para ir a dormir:

Si sufres de NES lo más probable es que tendrás dificultad en conciliar el sueño. Algunos comedores nocturnos reportan levantarse hasta  tres veces por la noche, y encuentran que comer es la única forma de poder volver a dormir. Esta disrupción de los patrones del sueño interfiere con el poder de concentración y realizar tareas diarias, como el trabajo. Este tipo de somnolencia difiere del sentirse un poco cansado o deprimido.

  • Levantarse a media noche y comer:

Las personas con NES se levantan por lo menos una vez en la noche y para ellos es necesario comer para volver a dormir.

  • Sensación de depresión:

La depresión es muy común entre las personas que padecen de NES. A su vez el estrés diario se asocia con el 75% de las personas que son comedores nocturnos.

 

Complicaciones médicas por NES

Reflujo: Hay relación entre el reflujo y comer demasiado rápido, por lo que comer de esta manera y regresar a la cama puede causar este problema.

Diabetes tipo II: No existe relación directa entre el NES y la diabetes tipo II; sin embargo el síndrome suele llevar a los pacientes a ganar peso y los pone en un riesgo serio de obesidad, que aumenta la probabilidad de padecer diabetes.

Hipertensión: La presión arterial aumenta con la ganancia de peso.

Artritis: La ganancia de peso causada por NES puede afectar la movilidad y causar estrés a las articulaciones.

Enfermedades cardiovasculares: El sobrepeso y la obesidad a consecuencia del NES pueden causar un riesgo de padecer de enfermedades cardiovasculares. Cuando es combinada con otras enfermedades como hipertensión, diabetes, y una vida poco saludable, las probabilidades de padecer estas enfermedades son aún mayores.

 

Pedir ayuda

Para muchas personas padecer el síndrome es embarazoso e intentan mantenerlo en secreto. El tratamiento para NES empieza con la educación del paciente sobre su condición; de esta manera se toma conciencia de la situación, y se puede empezar a identificar los disparadores que influencian la manera de comer. Como en los trastornos de conducta alimentaria, los pacientes se benefician cuando la ayuda es interdisciplinaria y se pone a disposición de los pacientes nutricionistas, psicólogos y psiquiatras. Es importante para estos pacientes que exista modificación de comportamientos, cambiando su sistema de creencias. Si ellos creen que se encuentran si poder ante la situación, no podrán hacer las modificaciones necesarias para resolver el problema.

 

Pautas que pueden ayudar

  • Dejar de comprar comidas tentadoras que pueden ser el gatillo para las comilonas nocturnas
  • Si vives con otras personas coméntales tu caso y pídeles que mantengan comidas tentadoras en su propia habitación, fuera de tu alcance
  • Elige comidas que te puedes permitir comer durante la noche, como una fruta , un poco de zumo o de yogur
  • Mantener un diario de comidas para saber la cantidad de calorías que se están ingiriendo, y a qué horas. De esta manera con toda la información recopilada se pueden realizar cambios apropiados
  • Aumentar la actividad física y seguir un programa de ejercicio continuo
  • La psicoterapia puede ser una herramienta importante para pacientes con altos niveles de estrés, depresión y ansiedad
  • Medicación: algunas medicinas (sobre todo los recaptadores de serotonina) son bien toleradas por los pacientes con NES. Por supuesto, antes de tomar cualquier medicamento es importante consultar con un médico

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