CómemeLinda JaivinISBN: 9788496580473Formato: Tapa blanda – 288 PágsEditorial: Emecé
Cuatro amigas se reúnen para intercambiar experiencias sobre sus conquistas amorosas y sus fantasías sexuales. Julia es una fotógrafa obsesionada por los chicos jóvenes; Helen es profesora de ideología feminista con deseos inconfesables; Chantal es editora de una revista de moda, con tendencia a dejarse seducir por nuevas experiencias y Philippa, una escritora que oculta su lesbianismo y sus tendencias sadomasoquistas.
Hoy, con motivo de la semana tematica, estoy rescatando una reseña que escribir hace año en otra plataforma. Al ir a cogerla, decidí reescribir o adaptar algunos de los cometarios para ponerlos un poco más al día, pero supongo que debo avisar que esta fue la primera novela erotica para mujeres que lei en mi vida. ¡Y de eso ya hace algunos años!
Yo nunca hubiera cogido este libro si no llega a ser por la opinión de KaylaMorrison, que me llamo la atención respecto a esta novela que no conocía en su momento. Como me puso los dientes largos, mire a ver si lo podía sacar de alguna biblioteca y coincidió que al día siguiente ya lo tenía en mis manos. No quiero adelantar nada, así que iré por orden.
Ya para empezar me costó muchísimo conseguir información de esta autora, que permanece un poco en las sombras. No hay biografía propiamente dicha, solamente unas fotografías y referencias a su colaboración en algunas revistas. Sobre todo he encontrado una página cuya biografía era únicamente una frase:
Escritora y traductora australiana, conocida por su best-seller de corte erótico Cómeme
He leído en alguna página en ingles que es especialista en cultura china, lo cual explica algunas cosas de la novela.
La trama (si es que se le puede llamar así) se puede resumir en esto: Cuatro mujeres australianas, de treinta y pocos años y estilos de vida diferentes, se conocen desde el instituto y siguen manteniendo el contacto. El nexo que les une es su conversación, compartir tardes de café y chocolate, o cenas regadas con abundante vino en casa de alguna de ellas. ¿Y su tema de conversación principal? El sexo
Philippa, la más joven de ellas, aspira a novelista erótica. De este modo, Cómeme danza entre las conversaciones, fantasías, cartas o extractos de la novela erótica. No existe hilo argumental concreto, simplemente la rutina diaria y las distintas anécdotas de los personajes. Como veis, la mayor parte del libro es totalmente aleatorio, y podríamos cambiar los capítulos de sitio y no nos enteraríamos.
En cuanto a los personajes únicamente voy a hablar de las cuatro protagonistas, ya que la multitud de amantes, amigos íntimos o conocidos, no representan nada característico… de hecho, si los llamaran X ó Y, no tendrían más personalidad que la que les otorgó la autora: casi ninguna.
Chantal es el topicazo de mujer joven, pero ya tirando a madura, que dirige una revista de moda. Elegante y sofisticada, os podéis imaginar una representación de ella como en “El diablo se viste de Prada”. Sin embargo, siente atracción por cierto tipo de hombres que no saldrían en revistas: poetas, bohemios, artistas en general... ¿Instinto maternal? ¿Resquicios de la juventud? La mayoría del tiempo adopta una actitud del tipo “no necesito a ningún hombre para vivir, y aunque me gusta el sexo con ellos… prefiero no depender de nadie”
Philippa es novelista e intenta publicar una obra de “erótica”. Su vida es casi un misterio, ya que es la única que nunca habla de ella a sus amigas (aunque por supuesto nosotros sabremos lo que hace y lo que piensa porque lo estamos leyendo). Con orientación sexual un tanto confusa, su objetivo en el momento es que la publiquen… a toda costa, para lo cual, parece que recoge historias de la vida de sus amigas.
Julia es una fotógrafa profesional y muy desinhibida sexualmente. Le gustan jovencitos, unos 10 o 12 años menores que ella. Aunque quiera aparentar que solo son ligues, busca una relación estable y cariño, por lo que le acaban rompiendo el corazón. Es la más alocada de las 4 amigas, aunque no necesariamente la que aporta historias más jugosas.
Helen es profesora de cultura femenina en la universidad, inhibida, rellenita y con complejos. Muy sencilla vistiendo, sobre todo con color beige. Es quizá la más escandalizable (si esa palabra existe) de ellas, y la que menos tiene que contar… al principio. Quizá podríamos caracterizarla por sus complejos, mitad por sí misma, mitad por el que dirán. Aunque esto no le impide desmelenarse de vez en cuando…
Quizá lo primero que pueda pensar alguien al comenzar a leer el libro es lo mucho que se parece a sexo en Nueva York. Y el problema es que no puedo desmentirlo ni afirmarlo, porque nunca he visto esta serie (ni su película, por supuesto). La verdad que alguna vez haciendo zapping lo intenté, pero no acabó de hacerme gracia y cambie de canal.
Aunque por la idea predefinida que tengo de la serie, considero que si se parece mucho, salvo la diferencia que en la televisión son mucho más esclavas del glamour (¡Dios mío! Los vestidos y modelitos que llevan… con lo que cuesta cada uno) y en este libro, comen mucho mas. Y no, no es un juego de palabras.
Yo era la primera vez que leia algo de esta temática, ya lo identifiques con novela erótica, o femenina. Siempre rehuí un poco del genero “para mujeres” y en aquel momento entendí porque. Esta obra cae en muchísimos tópicos, desde la típica mujer inhibida de “¡Oh! ¡Dios mío! No puedo ni enseñar una rodilla” que pasa a desmelenarse de manera bestial para luego entrar en razón y sentar la cabeza.
¿Y qué me decís del tópico: novelista femenina, con una clara orientación lésbica, que desprecia a los hombres porque no pueden aportarle nada que no haga una mujer, porque la mujer sabe mejor lo que quiere y es un ente superior, pero sin embargo me tiro al primer jovencito buenorro que pillo?
Ya ni entro en los clichés de las fantasías: vigilantes de seguridad, marineros, camioneros, bohemios artistas domadores de serpientes… Aunque visto así de lejos, la verdad que me da un poco la risa.
También tengo que decir que al principio del libro se concentran demasiadas escenas eróticas, algunas de ellas muy explicitas. Tal vez en las 100 primeras páginas leas más contenido X que en el resto, lo que te puede hacer desistir. De hecho, yo casi lo dejo, porque aunque según empecé me resulto divertido, 300 páginas así no creía que las fuera a aguantar, o al menos no de continuo.
Además, los personajes no me gustaron, me resultaron un tanto estúpidas. No me siento en absoluto identificada con ellas, quizá porque desde la pubertad no tengo un grupo de amigas súperintimas (y aquellas eran una víboras de cuidado) sino que por motivos personales, y más tarde profesionales, siempre me rodee de hombres. Y la manera de tratar el sexo y las relaciones es completamente diferente.
Únicamente tengo que decir a su favor, que es muy fácil de leer, y que se hace muy rápido. Tal vez fue por eso por lo que termine de leerlo. En cuanto a si lo recomiendo… si has leído completa la opinión, tú sabrás mejor que yo si te apetece leerlo o no. Yo le había puesto bastantes expectativas, así que es posible que el chasco fuera por ese motivo. Eso sí: si no te gusta la serie de Sexo en NY, lo mejor es que ni lo intentes.