La expiación o salvación en el Capitalismo es la acumulación, pero lo acumulación sin fin en éste sólo puede llevar a un estado de desesperación que culmina con la muerte. La redención en el Capitalismo se transforma en un culto a aquella. La liberación no existe como tal en el Capitalismo al ser sustituida por un estado de culpabilización permanente. Por lo tanto el Capitalismo es una religión que libera a los poseedores y esclaviza a los desposeídos del estado de desesperación en una larga carrera hacia la destrucción.