Habíamos oído hablar de esta cervecería y todas las opiniones eran las mismas: raciones enormes y ricas.
Está situada en la calle principal de Carral, aquí os dejamos, como siempre, el plano:
Advertidos, como estábamos, del tamaño de las raciones, decidimos pedir para cuatro personas: 1 ración de croquetas, media de "raxo" con pimientos y patatas y media de puntillas de calamar.
Y sí, nos llegó. A pesar de pedir sólo dos medias raciones y 1 de croquetas para 4, cenamos bastante bien.
Los precios son baratos y hay bastante diversidad: pizzas, pasta, carnes, pescados,ensaladas...
El local es muy amplio y con bastante luminosidad.
Los postres, como muchas veces pasa en este tipo de locales, no eran caseros.
En definitiva, un buen local para comer contundente y barato.