Comercio justo como incorporarlo a tu vida cotidiana

En este mundo dual en el que vivimos, si hablamos de comercio justo estamos diciendo que existe entonces un comercio injusto.

El comercio internacional está mayoritariamente en manos de unas pocas grandes multinacionales, que imponen injustas condiciones a los productores, acaparan las redes de distribución y publicidad, y cuentan con beneficios fiscales.

Problemas del comercio internacional

En el sistema de comercio descrito antes salen perdiendo, principalmente:

Los productores, que no ven recompensado dignamente su trabajo.
Los pequeños productores y distribuidores, que no pueden acceder a los grandes mercados donde compra la mayoría de la población, porque están acaparados por los monopolios existentes. O si lo hacen es sometiéndose a injustas condiciones comerciales.
El medio ambiente, ya que el beneficio económico es la única prioridad en este sistema de comercio.

¿Qué es el Comercio Justo?

El comercio justo es un sistema comercial solidario y alternativo al convencional que busca una mayor equidad en el comercio internacional prestando especial atención a criterios sociales y medioambientales.

Según la definición consensuada internacionalmente: «contribuye al desarrollo sostenible ofreciendo mejores condiciones comerciales y asegurando los derechos de productores/as y trabajadores/as desfavorecidos, especialmente en el Sur».

Sus pilares son:

Condiciones laborales y salarios dignos,
No trabajo infantil,
Igualdad entre hombres y mujeres,
Respeto al medio ambiente

Existen 10 criterios, establecidos por la Organización Mundial del Comercio Justo, que deben cumplir las organizaciones que trabajan en Comercio Justo:

Creación de oportunidades para productores con desventajas económicas.
Transparencia y responsabilidad
Prácticas comerciales justas
Pago de un precio justo
Asegurar ausencia de trabajo infantil y trabajo forzoso
Compromiso con la no discriminación, equidad de género y libertad de asociación (sindical)
Asegurar buenas condiciones de trabajo
Facilitar el desarrollo de capacidades
Promoción del Comercio Justo
Respeto por el medio ambiente

¿Cómo sé que un producto es de comercio justo?

Porque llevan el sello internacional Fair Trade.

La Organización Internacional del Comercio

Justo certifica a las organizaciones que cumplen los 10 criterios citados antes.

Esta certificación es revisada periódicamente.

Comprar productos con este sello Fair Trade es una de las maneras de hacer un consumo responsable.

¿Cómo incorporo productos de Comercio Justo en mi vida cotidiana?

Cada vez hay más variedad de productos de comercio justo.

Lo que más abunda es la alimentación y artesanía, pero ya hay otros productos como textil, cosmética, juguetes, libros, etc.

A mí lo que me sirve es ir de vez en cuando a la tienda de comercio justo, curiosear todo lo que hay y probar productos nuevos que uso habitualmente pero no de comercio justo. Por ejemplo, si por lo general usas una crema hidratante, prueba una de comercio justo. Si te gusta, puedes habituarte a comprar siempre esa crema allí y te asegurarás de que es un producto de calidad y que se están cumpliendo los criterios de justicia social y ambiental que vimos antes.

Lo mismo con galletas, zumos, chocolate o café. En el caso del café y el chocolate es realmente importante que sea de comercio justo, ya que estos productos, en el comercio internacional, están especialmente involucrados en condiciones de vida de explotación para los agricultores.

Ve incorporando a tu ritmo estos productos y sustituyéndolos por los que consumes habitualmente en casa. Te sorprenderá la calidad y querrás volverlos a comprar

También si tienes que hacer algún regalo, en la tienda de comercio justo puedes encontrar muchos productos de textil y artesanía originales y de calidad que igualmente sabes que están beneficiando a las personas que lo han hecho.

¿Donde compro productos de Comercio Justo?

Según los informes generados por la coordinadora española de Comercio Justo, cada vez la presencia de productos de comercio justo es más amplia y es más fácil encontrarlos en más comercios.

Principalmente, estos productos se encuentran en tiendas de comercio justo:

Ong como Oxfam o Setem tienen tiendas en muchas ciudades con productos de comercio justo.

También hay pequeñas empresas de comercio justo.

Algunas organizaciones (como parroquias o colectivos de solidaridad) disponen un local para distribuir los productos o lo hacen en puestos instalados en ferias u otros eventos.

También hay comercios que tienen un espacio reservado con productos de comercio justo.

Conclusión

Por lo general, apuesto por un consumo local de productos que se hayan fabricado cerca de donde vivo.

Pero la realidad es que aquí no se produce de todo, así que compro también productos de fuera.

Los productos de comercio justo han sido fabricados generalmente en países empobrecidos, siguiendo los criterios mencionados arriba, favoreciendo una vida digna para los productores.

Me encantaría que todo el comercio fuera justo, pero de momento, me parece buena idea conocer qué productos de comercio justo tengo a mi alcance y priorizar estos a la hora de comprar.

Fuente: Noemí Rodríguez, autora del blog Viviendo Consciente

¿Has comprado alguna vez productos de comercio justo?

¡Que disfrutes de un magnifico y positivo día!