25
2014 actualidad // Coaching personal // Miguel Benavent de B.
COMERSE EL MUNDO!!! (I)
Escrito por Miguel Benavent de B. Sin comentariosMe hace una cierta gracia este momento en la vida de mi hija, cuando descubre que “hay vida, más allá de su clase en el colegio”. Hasta ahora, sus únicos amigos eran sus compañeros de clase, con los que compartió todos los años anteriores. Pero hoy, a sus 14 años, ha descubierto que el mundo es mucho más grande, e incluso que hay vida más allá de esta gran ciudad -un tanto provinciana y críptica, aunque parezca lo contrario- que es Barcelona.
Confío en ella, la amo! Me hace ilusión verla cómo descubre paso a paso su nuevo mundo pre-juvenil, lleno de paradojas y de personas diferentes, que le ayudan a percibir una nueva manera de vivir. Ahora es algo parecido a como yo fui a su edad y durante muchos años, en que no paraba ni un minuto quieto y que era requerido para animar las cenas, los planes y las primeras fiestas. Supongo que era mi capacidad de adaptarme a cualquier entorno o ambiente, más mi cualidad de buen conversador, divertido, ingenioso y siempre un tanto irónico. Más que nada, supongo que porque en el país de los ciegos, el tuerto es rey!
Mi amada “hijita” está en ese momento en que mide su importancia y sus logros personales por la cantidad de planes que le proponen, cada día. A esa edad, el incipiente y necesario ego y el reconocimiento público van cogidos de la mano! Aún así, debo admitir que, desde peque, la eduqué para tener autoestima, bien escaso entre algunas mujeres de una cierta edad, lamentablemente. Mi hija siempre fue autosuficiente y, como yo, odia la incoherencia, la injusticia y la mentira, lo que es un don… aunque también es algo que le hará sufrir, viviendo en este mundo que vivimos. Será su aprendizaje. Aún así, también intento explicarle que no todo en la vida es malo o bueno, sino que depende del sentido que le dé y de los ojos con que la mire. Y le invito cada día a conocer más mundo para ser más tolerante y acepte la diversidad, así como a esforzarse por cambiar y mejorar todo aquello que no le guste en él, que su vida y todo en ella está en sus manos…
Seguirá…
Etiquetas: adolescencia, felicidad, hijos