Comic Review – Starlight: El regreso de Duke McQueen

Comic Review…por César del Campo de Acuña

Starlight. El regreso de Duke McQueen de Mark Millar y Goran Parlov

Corriendo el riesgo de repetirme, debo decir que nunca he sido un gran aficionado a las Space opera pero entra dentro de lo normal al haber crecido en un hogar en el que todo lo que tuviera que ver con la ciencia ficción espacial era denostado con saña y muecas de asco. Así es amiguitos, yo no tengo esos recuerdos nostálgicos de sentarme a ver La Guerra de las Galaxias con mi señor padre o de que me dejara sus tebeos de Flash Gordon. Ojo, que nada que objetar al respecto, es simplemente una explicación de porqué el género nunca me ha llamado demasiado. Y miren que lo intento. Entre películas, videojuegos y comics trato de meterme en él, pero no termino de conseguirlo. Valga por ejemplo que estoy tentado en hacer la colección de Los 4 Fantásticos de John Byrne pero no me atrevo por todo el tema cósmico. Pero oigan, todo esto que les cuento no quiere decir que no valore las cositas que adquiero en un formato u otro, como por ejemplo Starlight: El regreso de Duke McQueen de Mark Millar y Goran Parlov.

Por aquello de ser medianamente original en esta ocasión no comenzare hablando de Mark Millar. Empezare hablando de Goran Parlov, un dibujante al que conocí gracias a su sensacional labor en la primera etapa MAX de The Punisher a cargo de Garth Ennis. Puede que sea porque tengo muchísimo aprecio a esa línea (en gran parte, junto al videojuego Batman: Arkham Asylum fueron los responsables de que volviera a las viñetas) pero el estilo del dibujante croata siempre me ha gustado por su personalidad, por esa capacidad de sintetizar la acción de manera directa y por la expresividad (especialmente en los rostros femeninos) con la que dota a los personajes con apenas unas líneas. ¿Y qué tal en Starlight: El regreso de Duke McQueen? Pues muy bien la verdad. Nos ofrece el trabajo al que tiene acostumbrado a sus admiradores pero cargado de luz y fantasías imposibles (tanto en el diseño de las naves que homenajean a Flash Gordon o Dan Dare como en las edificaciones y entornos por los que los protagonistas se mueven). Visualmente el cómic es estupendo y no tengo un pero que ponerle a la labor de Parlov.

Y ahora hablemos de Mark Millar. El hijo de su madre lo ha vuelto hacer en Starlight: El regreso de Duke McQueen. El cómic es realmente divertido; Tiene emoción, drama, acción y te deja esa sensación agradable en el paladar una vez lo lees. Pero, a su vez, te deja la sensación de que la historia/trama en si no son nada especial, de hecho, al ser casi todas su obras tan referenciales a otras, te parece hasta poco original la premisa sobre la que se sostienen todas las páginas. En resumen, te aborda un reflejo que te dice: esto se te podría haber ocurrido a ti. Pero no, no se te ha ocurrido a ti, se le ha ocurrido a él (una vez más y van…) y al menos, en esta ocasión sin intentar ser más Millar que el propio Millar (es decir, sin pasarse en burradas o en ataques gratuitos al lector de cómic que son dos elementos que abundan en su obra desde que se ha convertido en el vende ideas más prolífico de la industria del cómic). Desde que leí Shaolin Mutants de Pere Perez, ningún tebeo de los que he devorado me había sentado tan bien como Starlight: El regreso de Duke McQuenn.

Si, ya sé que no he hablado del argumento, de los personajes ni de nada en especial más allá de los autores pero creo que merece la penan que descubran esta historia llegando con el mínimo de información sobre ella para disfrutarla al 100%. Yo no pude quedar más satisfecho con la edición, precio e historia de este relato homenaje a todos esos viejos héroes intergalácticos que hicieron las delicias de toda una generación de lectores de cómics y a los que hoy el mundo parece haber olvidado por no tener sitio para la aventura y la fantasía.