Comiendo sano… ¡en San Valentín!

Tengamos o no pareja…. ¡no podemos olvidarnos de celebrar San Valentín! Ya sea con tu novi@, marido o mujer o… ¿por qué no? ¡con tu mejor amig@!, podemos preparar un menú romántico, divertido y sano para celebrar lo enamorados que estamos de nuestra pareja o de nuestro mejor amigo, porque al fin y al cabo, San Valentín no es más que una manifestación de amor y amistad.

Para empezar, podemos preparar de primero una ensalada de pasta. Pero no se trata de una pasta cualquiera. En esta ocasión compraremos pasta  de corazones. Las hay de colores y son ideales para aderezarlas como queramos: con tomate, atún, maíz, lechuga, queso fresco… ¡y aceite y vinagre!

De segundo, podemos elegir entre carne y pescado, lo que más nos guste. Una receta fantástica sería dorada a la sal horneada al vinagre balsámico. Tan sólo tendremos que meter los filetes en el horno, con la piel hacia arriba, durante unos 15 minutos. Mientras tanto, calentamos  a fuego lento el vinagre balsámico con salsa de soja. Veremos que se forma una especie de caramelo líquido. Lo echamos por encima del pescado….¡y listo! Este plato podemos acompañarlo con una guarnición (patata, zanahoria, guisantes, pepino…)

Para los más carnívoros: solomillo con salsa de mostaza. Cogemos el solomillo, los untamos de mostaza y lo metemos al horno dentro de una fuente aceitada. Podemos tenerlo el tiempo que queramos, ya que dependerá de si la carne nos gusta muy hecha o poco hecha. A continuación, el jugo que ha soltado, lo echamos en una sartén y lo reducimos con nata y dos o tres cucharadas de mostaza (al gusto). Cogemos un plato y ponemos el solomillo con la salsa por encima. Unas patatas pondrán la guinda final a este sencillo plato.
Y de postre, nos daremos un capricho. Podemos barajar varios postres. Si somos muy golosos, podemos preparar un ¡brownie con forma de corazón! Añádele helado de vainilla o menta y… ¡mmmmmm! Los amantes de las frutas podemos optar por unas fresas con chocolate, sin perder así el toque dulce que todo postre se merece.

¡A disfrutar!