Murray, de 58 años y quien fue el médico personal del artista, ha sido acusado por la fiscalía de homicidio involuntario y podría enfrentarse a una pena de hasta 4 años de cárcel si recibiera un veredicto desfavorable. En una vista preliminar celebrada en enero, el médico reivindicó su inocencia y se declaró "no culpable".
