Entre agosto y septiembre es cuando más probabilidades hay en España de que nos sorprenda una tormenta eléctrica. Éstas se forman cuando el aire caliente y húmedo asciende hasta encontrar el aire frío. En ese punto comienzan a formarse grandes nubes que descargarán muchos litros de agua en muy poco tiempo y también se formarán rayos.
La mejor forma de evitar una tormenta eléctrica es la prevención. Antes de salir con la bicicleta deberíamos mirar siempre la previsión meteorológica. En caso de que en dicha previsión haya probabilidades de tormentas eléctricas lo más razonable es no salir y dejarlo para otro día.
Pero en el caso de que ya estemos con la bicicleta y nos sorprenda una tormenta de este tipo hay que seguir una serie de pautas.
Qué hacer en caso de tormenta eléctrica
Es más seguro estar en zonas urbanas
Las zonas urbanas son mucho más seguras que las rurales. Los propios edificios de la población van a atraer los rayos y van a ejercer de pararrayos. Por lo tanto, si estamos en una población lo más razonable en refugiarnos en algún edificio. Podemos entrar en algún bar a tomar algo mientras pasa la tormenta.
En las zonas rurales hay muchas más probabilidades de que seamos alcanzados por un rayo que en zonas urbanas.
Detenernos y alejarnos de la bicicleta
En el caso de que no estemos en una zona urbana lo primero que tendremos que hacer es detenernos. La propia velocidad generada por la bicicleta crea una turbulencia de aire que atrae los rayos.
Además la propia bicicleta, ya sea de aluminio o de carbono, también atrae a los rayos. Las de carbono atraen los rayos aún más que las de aluminio.
Lo recomendable es pararse y bajarse de la bicicleta, y alejarnos de ella unos 30 metros.
Apagar todos los aparatos electrónicos
Los aparatos electrónicos atraen la electricidad, por lo que es recomendable apagar nuestro teléfono móvil y también el cuentakilómetros o GPS que llevemos en la bicicleta.
Alejarnos de elementos metálicos
No debemos estar cerca, de alambradas, verjas, vías de tren, instalaciones eléctricas, etc. Todos estos elementos atraen los rayos.
No refugiarse en árboles o rocas aisladas
Todos hemos escuchado alguna vez que no hay que refugiarse debajo de un árbol en caso de tormenta eléctrica. Un árbol o roca aislada atraerá los rayos.
En el caso de que estemos en un bosque podremos refugiarnos debajo de los árboles más bajos, ya que son los árboles más altos los que harán de pararrayos.
No cruzar arroyos o charcos
El agua es muy buena conductora de la electricidad, por lo que no debemos cruzar arroyos ni nada por el estilo.
Posición de seguridad
En el caso de que no tengamos ningún lugar seguro para refugiarnos, lo ideal es colocarnos en cuclillas y sin quitarnos las zapatillas, ya que la goma de éstas actúa como aislante.
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