FUENTE:Autismo en escuela
Debido a su trastorno, los niños con autismo tienen ciertas sensibilidades y necesidades que la mayoría de los otros niños no experimentan. A continuación incluimos algunos ejemplos de los desafíos que enfrentan algunos niños con autismo:
• lenguaje hablado y comunicación: El problema fundamental respecto a la comunicación es la incapacidad de reconocer que sus necesidades, deseos, pensamientos, sentimientos, etc...pueden ser comunicados. Esto lo demuestra el hecho de que generalmente no se hace un intento de comunicarse con el niño (con gestos, por ejemplo) en la ausencia del lenguaje verbal. Los niños con autismo pueden tener dificultad con el lenguaje hablado o reconociendo que su y sentimientos pueden ser comunicados a otra persona. Algunos tendrán un habla limitada,mientras otros pueden usar aparatos para la comunicación, lenguaje por señas, o la escritura para comunicarse. Algunos niños con autismo pueden usar la ecolalia—la repetición de una frase que acaban de escuchar—sin entender su significado o la respuesta esperada. La ecolalia también puede ser una manera del estudiante expresar su frustración, pedir ayuda o comunicar que no le gusta la actividad que está realizando. La muestra de ecolalia puede ser inmediata o atrasada.
• necesidad de monotonía y dificultad con las transiciones: A muchos niños con autismo les gusta que las cosas se mantengan iguales y tienen una necesidad de estructura en sus vidas mucho más marcada que la de los estudiantes neurotípicos. Salir de casa para ir a la escuela, por ejemplo, es una de las primeras y más difíciles transiciones que experimentará un niño con autismo. Un desafío similar se repite durante las vacaciones, al terminar el año escolar y al comienzo de cada nuevo año escolar. Las transiciones entre una actividad y la siguiente también pueden ser un desafío para los niños con autismo. Dentro de la escuela, los cambios del salón de clases a otro ambiente— p.ej., biblioteca, cafetería, gimnasio, patio de recreo, asamblea o clases especiales— todos pueden ser potenciales desafíos para los niños con autismo. Puede que se alteren mucho con el menor cambio, como por ejemplo cuando alguien ocupa “su” asiento o cuando debido a un paseo escolar tienen que perder una clase a la que asisten diariamente.sensibilidades sensoriales: En general, muchos niños con autismo tienen una sensibilidadextrema a los estímulos sensoriales, mucho más que los estudiantes neurotípicos. Estas diferencias en la vista, el oído, el olfato, el tacto y otros sentidos pueden afectar la capacidad de concentración del estudiante. Por ejemplo, las luces fluorescentes del salón de clases pueden molestar tanto a un niño con autismo que no le es posible terminar una asignación. Los niños con autismo también suelen taparse las orejas o canturrear para filtrar los sonidos del salón que los distraen.Naturalmente, eventos inesperados como un simulacro de incendio o un sonido lo suficientemente fuerte como para molestar a los estudiantes neurotípicos, puede provocar gran alarma e incluso dolor a un niño con autismo. Aunque usted no puede aliviar las sensibilidades del estudiante, debe por lo menos estar al tanto de ellas y tratar de ayudarlo a manejar estas experiencias diarias de manera que pueda llevar una vida útil. Esta es un área donde la colaboración con los padres y el equipo escolar puede ser de gran ayuda.