A estas alturas sabemos qué es el Síndrome de Ovario Poliquístico, pero aún así existen muchos conceptos erróneos sobre el SOP que causan confusión, diagnósticos erróneos en las mujeres que experimentan la gran variedad de síntomas asociados a este trastorno.
Dado la multitud de variables que entran en juego, hasta el National Institutes of Health propuso cambiar el nombre ya que SOP no refleja las complejas interacciones metabólicas, hipotalámicas, ováricas y suprarrenales que caracterizan al síndrome.
Altos niveles de andrógenos, no es solo un problema ovárico
Uno de los principales criterios de diagnóstico del SOP es la elevación de andrógenos. Las dos principales hormonas androgénicas que causan estos síntomas en las mujeres son la testosterona y la androstenediona. Aunque también incluimos otro andrógenos como dihidrotestosterona (DHT), dehidroepiandrosterona (DHEA) y sulfato de dehidroepiandrosterona (DHEA-S).
Es normal que las mujeres tengan hormonas androgénicas en su sistema; de hecho, la baja testosterona en las mujeres se asocia con un bajo deseo sexual, pérdida ósea, fatiga crónica, aumento de peso, trastornos del estado de ánimo y problemas cognitivos. Llamarlas hormonas sexuales “masculinas” es un nombre inapropiado.
Sin embargo, cuando estas hormonas son elevadas, como es generalizado en el SOP, los síntomas del exceso de andrógenos comienzan a manifestarse. Para algunas mujeres, esto afecta su función menstrual y fertilidad. Para otras, continúan teniendo ciclos regulares pero luchan con cambios físicos como crecimiento de vello no deseado (hirsutismo), acné y aumento de peso, entre otros síntomas.
Una de las principales confusiones en el SOP es saber de qué órgano provienen estos andrógenos. Si bien los ovarios generalmente son culpados por los andrógenos elevados, se estima que del 20% al 30% de las mujeres con SOP tienen exceso de andrógenos suprarrenales.
Las glándulas suprarrenales producen todo el sulfato de DHEA (DHEA-S) y el 80% del DHEA del cuerpo. Las glándulas suprarrenales también producen el 50% de androstenediona y el 25% de testosterona circulante. Como la DHEA-S y la 11-androstenediona no son secretadas por los ovarios, solo se usan como marcadores de la secreción de andrógenos suprarrenales.
¿Pueden tus glándulas suprarrenales causar síntomas del SOP?
En el cuadro de arriba hemos intentado recrear cómo las glándulas suprarrenales y los ovarios afectan a la producción de andrógenos. El hipotálamo y la glándula pituitaria, ambos ubicados en su cerebro, liberan hormonas que impulsan el ciclo de la alta producción de andrógenos, resistencia a la insulina, aumento de la grasa abdominal y sensibilidad alterada a la glucosa. Estos sistemas se llaman ejes hipotálamo-pituitario-adrenales o gonadal.
Mientras que la resistencia a la insulina y la insulina elevada a menudo impulsan la producción ovárica de testosterona, es el eje hipotálamo-hipófiso-suprarrenal el que estimula la producción de DHEA / DHEA-S y androstenediona. Estas hormonas pueden convertirse en testosterona por los tejidos periféricos del cuerpo. Este proceso puede ocurrir independientemente de los ovarios y de cualquier implicación con la insulina.
Esto significa que una mujer con síntomas de SOP podría tener un funcionamiento normal de los ovarios sin presentar quistes y sin resistencia a la insulina, y aún así ajustarse al perfil sintomático del síndrome.
Estrés y hormonas
La glándula pituitaria, estimulada por el cerebro a través del hipotálamo, secreta la hormona adrenocorticotrópica (ACTH) en respuesta al estrés. ACTH luego estimula las glándulas suprarrenales para producir cortisol, adrenalina y noradrenalina. Además de estas hormonas del estrés, la ACTH también estimula la producción de hormonas androgénicas suprarrenales, que incluyen DHEA, DHEA-S y androstenediona, vamos ¡una fiesta total!
ACTH sigue un ritmo diurno, lo que significa que es más alto en la mañana y más bajo en la noche, pero también se eleva en respuesta al estrés físico y emocional. El estrés activa el eje HPA, elevando la producción de ACTH y cortisol. La liberación de cortisol regula negativamente la producción de ACTH en un ciclo de retroalimentación negativa.
La ACTH también estimula la producción de DHEA / DHEA-S y androstenediona, que ayudan a proteger al cerebro de los efectos negativos del cortisol y otras hormonas del estrés. Pero como hemos comentados anteriormente, estas hormonas también causan los síntomas de andrógenos elevados que se observan en el SOP.
Diversos estudios (todos los links están al final del post), muestran que las mujeres que se encuentran en situaciones de estrés crónico extremo (por ejemplo, trastorno de estrés postraumático) tienen una respuesta de DHEA notablemente mayor a la estimulación de ACTH, así como una mayor respuesta de ACTH al estrés y a la estimulación de las hormonas hipotalámicas.
Resumiendo, esto significa que aquellas mujeres que están bajo un estrés crónico presentan un aumento de andrógenos, así como las hormonas también pueden comenzar a tener reacciones más severas antes situaciones estresantes.
¿Cómo se produce el estrés crónico?
El estrés crónico contribuye de forma importante al desarrollo de los síntomas del SOP, especialmente en mujeres con peso normal o bajo, con ovarios no poliquísticos y con una sensibilidad a la insulina normal.
Por desgracia, el estrés crónico está en todas partes hoy en día. Desde largas semanas de trabajo a constantes pensamientos negativos sobre nuestro cuerpo y apariencia física. Además, debemos de sumar eventos traumáticos, enfermedades agudas e infecciones, problemas con la microbiota y trastornos del sueño.
A algunas mujeres todo esto les lleva a restringir severamente su alimentación y a hacer deporte más a menudo y con mayor intensidad, llevando a sus cuerpos al borde del agotamiento por lo que los niveles de estrés son máximos.
Hay muchas mujeres cuyo SOP está causado por una dieta deficiente, ejercicio inadecuado, demasiados carbohidratos y azúcares refinados y un estilo de vida generalmente sedentario, lo que llamaríamos el SOP clásico y de manual.
Pero si te estás rompiendo la espalda tratando de seguir la dieta Paleo perfecta para el SOP, vas a CrossFit de cinco a seis días a la semana, y estás subiendo de peso, perdiendo tu función menstrual, creciendo vello en lugares extraños, desarrollando acné adulto cuando tenías la piel perfecta cuando eras adolescente, o simplemente te sientes como un camión que te golpea todas las mañanas cuando te levantas, puede ser que tu estrés crónico esté causando todos estos síntomas físicos y desequilibrios hormonales.
Si te ha gustado el post y te ha sido útil, déjanos un comentario 🙂 Además, te animamos a seguirnos en nuestra cuenta de Instagram y a que te unas a nuestro grupo privado en Facebook para mujeres con SOP.
Referencias: http://booksite.elsevier.com/brochures/stress/PDFs/berga.pdf https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/15531511 https://emedicine.medscape.com/article/273153-overview https://www.nature.com/articles/1300432 http://www.pnas.org/content/95/4/1852
La entrada Cómo afecta el estrés a tu regla se publicó primero en Paleo SOP.