Prácticamente todos los deportistas, ya sean profesionales o no, tiene asumido que la nutrición forma parte del entrenamiento y de la preparación. Y es que alimentarse correctamente es crucial para que el rendimiento deportivo sea el deseado.
En muchas ocasiones se le da mucha importancia a la alimentación antes y durante las pruebas, descuidando la alimentación del después. Pues bien, es tanto o más importante alimentarse correctamente después de la actividad física como antes y durante.

Vamos a ver algunas de las claves de cómo debería ser esta alimentación tras los esfuerzos.
Ventana metabólica

El término ventana metabólica corresponde al período en el que el organismo está mucho más receptivo a la hora de asimilar los nutrientes. En el caso de una actividad física la ventana metabólica estaría situada desde que se acaba la actividad hasta pasadas cuatro horas.
Aunque este período abarque aproximadamente cuatro horas es durante las dos primeras horas cuando la asimilación es más eficaz. Por lo tanto, para recuperarse de una manera eficaz hay que alimentarse durante el período que dura esta ventana metabólica.
Hidratos de carbono y suplementación
Tras un esfuerzo físico es recomendable alimentarse a base de hidratos de carbono y también de determinados suplementos. En cuanto a los hidratos de carbono hay que procurar que sean de calidad.

Los hidratos deberían tener un índice glucémico bajo o moderado. Estos son los hidratos que más rápido va a asimilar nuestro organismo, reponiendo rápidamente los depósitos de glucógeno de nuestra musculatura y del hígado. Algunos ejemplos de este tipo de hidratos son la fruta y los zumos naturales.
En cuanto a la suplementación también es importante porque durante un esfuerzo físico se destruyen fibras musculares. Hay suplementos denominados recovery que contienen aminoácidos que se van a encargar de reparar esas fibras que han quedado dañadas. Estos aminoácidos son los denominados aminoácidos ramificados y también la glutamina.
