La lucha contra el spam parece no tener fin. Los spammers cambian constantemente sus tácticas para ser notados, mientras que los servicios de correo electrónico y sus usuarios intentan continuamente frenar esta avalancha.
Los filtros de spam ayudan, pero los manuales pueden atrapar falsos positivos, y los automáticos no siempre aciertan. Esto significa que puedes terminar con basura en tu bandeja de entrada o, lo que es peor, perder un correo de alguien importante porque se identificó como spam.
Es esencial revisar regularmente el contenido de tu carpeta de spam y configurar una lista de remitentes seguros. Así, por ejemplo, podrías añadir a la escuela de tus hijos, tus principales contactos laborales o tu pareja. El correo enviado desde estas direcciones nunca será considerado spam, por lo que no tendrás que preocuparte de que algo te pase desapercibido. Estas listas se pueden configurar en casi todas las aplicaciones de correo electrónico y son fáciles de instalar. Aquí te explicamos cómo hacerlo.
Gmail
Haz clic en el ícono del engranaje en la esquina superior derecha de Gmail en la web, selecciona «Ver todos los ajustes» y abre la pestaña «Filtros y direcciones bloqueadas». Elige «Crear un nuevo filtro», luego ingresa la dirección de correo de la persona que deseas agregar a tu lista de remitentes seguros.
Haz clic en «Crear filtro» y luego decide qué hacer con todos los mensajes entrantes de esa dirección. Verás una opción que dice «Nunca enviar al spam». Haz clic en «Crear filtro» para confirmar.
Apple Mail
Apple Mail en macOS no tiene una lista de remitentes seguros como tal, pero puedes crear reglas que garanticen que los mensajes de direcciones de correo confiables siempre lleguen a tu bandeja de entrada. Abre la app, selecciona «Mail», «Configuraciones» y la pestaña «Reglas». Si haces clic en «Agregar regla», podrás configurar una regla que se aplicará a los mensajes entrantes.
Outlook
En Outlook para Windows, si encuentras un mensaje de correo electrónico en la carpeta de spam que no debería estar allí, selecciónalo y luego haz clic en «Spam» en la pestaña de inicio del menú superior. Tendrás la opción de «Nunca bloquear al remitente» y «Nunca bloquear el dominio del remitente».
A través del mismo menú puedes acceder a «Opciones de correo no deseado». Allí encontrarás una pestaña de «Remitentes seguros», donde puedes agregar o eliminar personas. Si estás usando Outlook en la web, haz clic en el ícono del engranaje (arriba a la derecha), luego selecciona «Correo no deseado» bajo «Correo electrónico», y podrás agregar una dirección de correo que debe ser confiable.
Es vital ser proactivo para asegurarte de que los mensajes esenciales no se pierdan en medio del constante ruido del spam. Estas herramientas están ahí para ayudarte; sólo tienes que usarlas.