Como cada mañana se refugió entre las sábanas durante unos instantes antes de sentarse al borde de la cama.
Como cada mañana se afeitó con el agua templada y se enjabonó la cara y las axilas para después rociarse con el desodorante.
Como cada mañana se vistió con la ropa que había preparado el día anterior y besó en la frente de su mujer que como cada mañana aún seguía dormida.
Como casi cada mañana tomó la linea 3 del metro, se procuró un asiento y dejó perder su mirada en la pantalla del móvil.
Como cada mañana se sintió miserable y agotado.
Como cada mañana tuvo que engañar a dos o tres ingenuos.
Como cada mañana la mañana se hizo tarde.
Y la tarde se hizo noche.
Y la noche era una mañana sin luz.
Como cada mañana se refugió…