“Cómo calienta el sol allí en la playa…y en la calle…y en el parque”. Científicos aseguran que los rayos Uva Largos son bastante peligrosos.

Hoy no quiero hablar de política, ni de lo buenos o malos que son los datos de la EPA según el medio o quien haga la valoración; ni de porqué se retira el socialista Griñán, aunque éste alegue motivos personales teniendo detrás todo el peso del caso de los ERE de Andalucía.

Hoy me gustaría hablarles, dado que la semana que viene estaremos todos en la playa, de algo mucho más peligroso para nuestra salud que la política o la corrupción. Se trata del hallazgo de un nuevo rayo solar. Les hablo de los UVA largos; una variante que representa el 75% de las radiaciones ultravioletas.

Y es que al parecer, estos rayos tienen la capacidad de penetrar de una manera más profunda en la piel debido a su mayor longitud de onda, provocando daños en los tejidos, inflamándolos y causando un mayor fotoenvejecimiento como aseguran los expertos. Algo, a buen seguro a tener en cuenta.

¿Pero qué vamos a hacer los españoles o concretamente los canarios ante esta noticia? Pues esperar a que se conozcan los primeros casos graves dentro de unos años de cáncer de piel o de reacciones alérgicas graves y desórdenes pigmentarios, porque parece que hasta que no vemos algo no nos creemos que sea cierto.

Y es que en esa desconfianza también pensamos incluso que ésta puede ser una campaña de aquellos que se dedican al sector farmacéutico, con la que pretenden asustar a la población y conseguir así mayores ventas en los meses de mayor afluencia turística en el territorio nacional. Que podría ser cierto, aunque me parece ligeramente descabellado cuando se trata de la salud utilizar este tipo de argumentos.

Es por ello que la solución, sea o no verdad, pasa por utilizar protector solar si vamos a salir de casa durante un buen rato, a no ser que viva usted en Londres donde casi reina la oscuridad por el mal tiempo. Pero es cierto que debemos de dejar de asociar la protección solar con la playa o el verano porque viviendo en Canarias el sol no perdona.

Así que ya saben, hagan caso a la canción “tú me das cremita, yo te doy cremita” y  eviten además en este mes de agosto que llega, abusar de la playa en las horas centrales del día, que si ya los rayos solares hacen daño de 12 a 4 de la tarde se convierten en muy peligrosos.  Y recuerden que si, como dijo Paulo Coelho, “cada día el sol ilumina un mundo nuevo”, me atrevería a agregar que “éste lo hace cada vez con más fuerza”.

Esta es la crónica habitual de un día como otro cualquiera…