Ojalá tuviéramos las claves para que la combinación de los tres elementos fuera fácil de integrar, pero la verdad es que no lo es.
Seguramente los test y las pruebas error/acierto son lo mejor en estos casos. Por mucho que os digamos, leáis, miréis en revistas, etc. si no sois pros de la decoración y sabéis bien como reaccionan unos materiales, colores u otras cuestiones, a la luz natural, la forma de una habitación, la altura, etc. tendréis que ir probando para ver como queda.
Analizando este salón sueco, podemos sacar ciertos puntos a seguir si tenemos que aplicarlo en una habitación similar:
- El papel de pared con motivos florales en colores oscuros e intensos está situado en la pared más pequeña y más oscura de la habitación, bajo la escalera, así que aunque son colores fuertes no abruma porque está utilizado en poca cantidad y una zona más discreta.
- La pared de ladrillo visto pintado de blanco, ocupa la siguiente pared en tamaño, aquí la luz natural rebota ayudando a iluminar el resto de la sala.
- Por último la pared de color azul o mejor dicho las paredes de color azul hacen de hilo conductor en el salón y resto de la casa, con el color del sofá y la cómoda y sube al segundo piso donde también es utilizado en el pasillo y un estudio.
Como veis, no es sencillo hacer esta combinación, pero viendo muchos ejemplos os ayudará a acertar a la primera a la hora de elegir tonos.
No solo el salón de esta vivienda nos gusta, este pequeño adosado es una maravilla y aunque ya tiene una edad, nos gusta ese aire vintage, tan hogareño y cálido de todas las habitaciones. Por cierto, una curiosidad, fijaos donde está el radiador en el salón, una altura algo particular ¿no? ¡feliz lunes!
Vía: Kvarteret Mäkleri