Una de las características que más definen a los productos de Apple es el carácter cerrado de su sistema. Algo que tiene un lado negativo, como el hecho de que todo lo que ocurra dentro del sistema pase por el filtro de Apple, pero también permite mantener un control mayor sobre la seguridad y el uso de los equipos. Si tienes un iPhone o un iPad y tienes hijos pequeños que puedan acceder a ellos, probablemente quieras establecer una serie de restricciones para que no hagan un mal uso del equipo. Te contamos cómo establecer restricciones para diferentes partes como el manejo de las aplicaciones, el acceso al navegador o a la cuenta de iTunes.
El sistema iOS (que luce tanto el iPhone como el iPad) tiene una serie de opciones para limitar el uso del dispositivo con un código PIN de cuatro cifras. Para acceder a estas opciones hay que acudir a la configuración del sistema, al menú general y a “Restricciones”. Las primeras restricciones que aparecen incluyen aspectos principales del sistema y sus aplicaciones. Por ejemplo, desde este submenú podemos bloquear el acceso a iTunes, una opción muy interesante para evitar que los niños realicen por error compras de apps o modifiquen los datos personales. También se puede activar en este punto una opción para bloquear en general la instalación o la desinstalación de aplicaciones en el sistema. Por último, en esta primera lista se incluye el acceso a Safari, el navegador integrado en el iPhone y el iPad.
Puede que bloquear por completo el acceso a la tienda de iTunes sea un movimiento demasiado drástico. Es probable que queramos que nuestros hijos puedan tener acceso a determinadas apps como juegos o herramientas educativas. A través de la opción de contenidos, podremos establecer un límite de edad para las apps o para el tipo de películas o canciones a las que puede acceder el usuario. En este punto también se puede establecer una contraseña a la hora de realizar compras o descargas de apps en eliTunes.
Por último, las restricciones también incluyen la capacidad de evitar que se realicen cambios en determinadas partes del sistema. Así, por ejemplo, podemos proteger con un número PIN a la cuenta del usuario para que no se produzcan cambios en los datos personales. También se puede proteger la aplicación de contactos para evitar que modifiquen o borren por error un contacto importante. Esta protección se extiende a otras partes del sistema como las fotos, el calendario o las redes sociales (Facebook y Twitter). Sin duda, se trata de un conjunto muy interesante de opciones para proteger el equipo con las que no cuenta Android (a veces se echa en falta un mayor desarrollo del aspecto de la seguridad interna del dispositivo en el sistema de Google).
Estas configuraciones se pueden combinar con algunas apps dedicadas que sirvan para restringir el acceso a determinados sitios web (como por ejemplo los contenidos adultos o los contenidos violentos). Uno de estos ejemplos es la aplicación Ranger Browser.
Vía | tuexperto.com