¿Empezó el verano y tienes ese tono pálido en la piel? Aprende aquí todo sobre bronceadores para iniciar el verano con una piel dorada.
Elige la textura correcta
Para mejores resultados, escoge un producto que tenga tanto lo que tú buscas como lo que tu piel necesita.
Un spray para quien tiene prisa:
Esta es la mejor solución para quienes no tienen el tiempo de su lado. El spray es una opción muy práctica, que deposita una capa seca en la piel y se filtra rápidamente. Además los sprays no son pegajosos y permiten vestirte muy poco tiempo después de aplicarlos gracias a su corto tiempo de secado (aproximadamente 10 minutos). También ofrecen el valor agregado de que pueden llegar a partes del cuerpo que de otro modo puede ser difícil alcanzar, como la parte posterior de las piernas y la espalda, sin tener que frotarlo.
Un gel para la piel grasosa:
Su textura fresca y no grasosa hace que el gel se aplique rápida y placenteramente y que sea ideal para quienes tienen problemas de brillo y quieren matificar su piel. Sin embargo, si tienes piel reseca, entonces probablemente el gel no es la mejor solución porque tiende a resecar la epidermis.
Un mousse para quienes no se pueden resistir ante una nueva textura:
Esta innovadora solución es particularmente fácil de usar gracias a su textura ligera y cremosa que se filtra deliciosamente en la piel. Ofrece mejor humectación para la epidermis que el spray o las toallitas, y deja la piel con una sensación de suavidad y tersura.
Leches y cremas para la piel:
Estos son los clásicos productos autobronceadores que requieren cierto grado de habilidad para aplicarse y que tardan mucho en secar. Sin embargo, son la solución más adecuada para la piel reseca porque ofrecen una humectación de larga duración.
Elige el tono correcto
Elige un tono dorado claro si quieres algo que puedes sostener. La intensidad del bronceado dependerá de qué tan seguido lo apliques. Si después de la aplicación el resultado es demasiado claro, repite el proceso cada día hasta que alcances el efecto deseado, después de lo cual deberás aplicar el autobronceador al menos una vez a la semana para mantener tu brillo dorado.
Prepara tu piel
Ya encontraste el producto autobronceador adecuado para ti, pero antes de que puedas comenzar a aplicarlo hay algunas cositas que debes saber si quieres terminar con un bronceado perfecto.
Hidrata tu piel:
Hidrata bien tu cara y cuerpo al menos una semana antes de aplicar el producto autobronceador porque esto suavizará y emparejará la piel y ayudará a que el producto se adapte a tu piel con mejores resultados. Recuerda, cuanto mejor humectadas esté tu piel, más uniforme será el bronceado. Consejo: Trata aplicando una mascarilla nutritiva el día anterior para mejorar tu tez.
Exfolia tu piel:
Utiliza un exfoliante justo antes de aplicar el producto bronceador para eliminar todas las células muertas de la superficie de la piel, poniendo especial atención a las áreas que son más propensas a tener zonas ásperas, como los talones, las rodillas y los codos. Esto garantizará un bronceado uniforme y radiante.
Claves para aplicar un autobronceador en crema, leche, mousse o gel…
En la cara
Aplica tu autobronceador tal como aplicarías una base, extendiéndolo desde el centro hacia fuera, cuidando de no exagerar en la zona T (cejas-nariz-barbilla). Como la zona del contorno de los ojos es más sensible y clara que el resto, aplica antes una crema para el contorno de los ojos para mantener un aspecto natural. Tampoco olvides las orejas, masajéalas con el producto que sobre en tus manos. Lo mismo se aplica para el cuello y la nuca; aplica el autobronceador a estas áreas con las palmas de tus manos para evitar que se hagan rayas. Cuando hayas terminado de aplicar el producto, pasa una bolita de algodón o la esquina de una toalla sobre tus cejas y las raíces de tu pelo para eliminar completamente cualquier exceso de producto y evitar un tinte anaranjado.
En el cuerpo
Para un acabado parejo y sin rayas, usa un paño humedecido con el producto autobronceador. Comienza por los pies y sube hacia los muslos antes de pasar al resto del cuerpo. Termina en las áreas más ásperas (rodillas, talones y codos), sin agregar más producto. Cuando llegues a tu espalda, lo más fácil que puedes hacer es usar un spray que te ayudará a alcanzar con más facilidad esas áreas que de otra manera son difíciles. Si tienes tiempo, deja secar durante 30 minutos antes de vestirte. Si no, utiliza una secadora de pelo para acelerar el proceso. Si cometes algún error, talla suavemente el área en cuestión (sin arrancarte la piel) y humecta. Esto bajará el tono de las rayas.
Cómo usar un spray
Dirige el rocío directamente a la piel y empareja el producto con la palma de la mano con movimientos hacia arriba y cuidando de no frotar.
Cómo usar toallitas
Cuando uses toallitas autobronceadoras en la cara, haz movimientos circulares como si estuvieras limpiándola, evitando las raíces del pelo y las cejas. Cuando uses toallitas en el cuerpo, simplemente pasa la toallita sobre las zonas deseadas y asegúrate de que la piel esté seca antes de vestirte (aproximadamente 10 minutos).
(Fuente: everydayme.com México)