Durante más de 25 años, Great Place to Work® ha estudiado la relación entre la cultura organizacional y el rendimiento de negocios. Conociendo empresas de distintos tamaños y operando en diversas industrias en 50 países, notamos que todas pueden ser un gran lugar para trabajar si hacen lo que tienen que hacer.
Los beneficios son muchos, comenzando por una mejora significativa en algunos indicadores duros relacionados con la gestión de personas, como la rotación voluntaria. Sabemos que las que están en las listas de Las Mejores empresas para trabajar presentan un porcentaje de rotación cercano a la mitad en comparación con el promedio del mercado.
La base de la cultura de estas empresas es la confianza. Relaciones abiertas y transparentes entre jefes y colaboradores, donde se comparte información y se expresan expectativas en forma permanente y de ambos lados. No solo se comunica sino que se escucha y se incluye.
Para construir una cultura de confianza, las organizaciones diseñan una diversidad de acciones y las implementan con coherencia, permitiendo que se instalen los comportamientos esperados y se conviertan en la manera de hacer las cosas.
En la última conferencia internacional de Great Place to Work® en San Diego, se destacaron tres aspectos o focos que una empresa debe tener en cuenta para construir un gran lugar para trabajar, y algunos ejemplos de Las Mejores USA 2016:
Definir el propósito de la organización y conectar a las personas a ese propósito. Sin un propósito la vida se siente vacía, igual que una tarea o un trabajo. Cuando la empresa no tiene claro su propósito los colaboradores no saben para qué hacen lo que hacen, y las tareas se vuelven una rutina sin sentido. De esta forma no aparecen conductas comprometidas, los resultados llegan con dificultad y los clientes lo notan.
La cadena de hoteles Hyatt dejó de pedir a sus recepcionistas que memoricen un discurso para atender a los huéspedes, con rígidas preguntas a la hora de hacer el check-in. Estos discursos estaban diseñados para obtener información del cliente, pero no mejoraban la experiencia. El propósito del Hyatt es "Cuidar a las personas para que puedan ser lo mejor posible". Hoy el recepcionista del hotel es invitado abrir un diálogo más simple y humano con el huésped, enfocándose en estar presente y ser él mismo (Hyatt está en el puesto N° 47 de Las Mejores USA 2016).
Vivir los valores. Es común ver la lista de valores de las empresas colgada en un bonito cuadro en la pared de la entrada, pero a veces ese es el único lugar donde los encontramos. Los valores deben verse reflejados en las decisiones, en las políticas y en las relaciones.
Atlassian, una empresa de tecnología con base en Australia, lanzó una compañía de software sin fuerza de ventas. La estrategia era crear excelentes softwares con precios competitivos y dejarlos disponibles para ser descargados desde internet. Esperaban que la gran experiencia de los compradores con el producto hiciera que los recomendaran a sus amigos. Pero para acompañar este modelo de negocio poco convencional, Atlassian tiene un conjunto de valores poco convencionales también, que dan forma a su cultura y a sus productos: "Empresa abierta, no m...", "Construir con corazón y equilibrio", "Jugar, como un equipo". Los nuevos empleados reciben en sus casas una caja de bienvenida 48 horas antes de su primer día de trabajo. Uno de los ítems de la caja son unos tatuajes temporales con cada uno de los valores. El primer día se desarrolla una conversación sobre lo que estos valores significan y como se usan todos los días para tomar decisiones de negocio (puesto N° 6 en el ranking de Las Mejores USA en el rubro Tecnología de 2016).
Escuchar a los colaboradores: la comunicación a dos vías es fundamental en la construcción de una cultura de confianza. Poner a disposición de los colaboradores mecanismos eficientes para que puedan hacer llegar sus ideas y sugerencias, sus reclamos.
En Scripps Health (servicios de salud) con base en San Diego, se construye confianza y transparencia con un estilo de cogestión, para agilizar las operaciones comerciales y poner foco en la cultura. Cuentan con el personal directamente en la planificación, escuchado sus ideas para diseñar cada detalle, desde el tamaño de los elevadores hasta la configuración de las habitaciones de los pacientes. Este diseño fue testeado por el personal para certificar la seguridad del paciente, la circulación de los profesionales y los temas de control de infecciones (puesto N° 42 en el ranking de Las Mejores USA 2016).
Revisando estos ejemplos, vemos que estas organizaciones tratan a sus colaboradores con respeto, les dan inspiración, motivación y las herramientas necesarias para realizar su trabajo, luego se apartan del camino y confían que ellos entregarán los resultados esperados.
Una cultura de confianza permite a las empresas responder con rapidez, comunicar libremente, incentivar la experimentación y generar una red de personas motivadas por un propósito compartido para satisfacer la demanda del negocio. ¿Está su empresa construyendo una gran cultura organizacional?
Por Carina Gómez Country Manager