Cómo debe ser un terrario para reptil

Cuando decidimos tener un reptil como mascota, lo primero que nos viene a la mente es que tamaño de terrario debo elegir. Seguido por la pregunta de cuál modelo, forma o disposición me conviene más y cuál se adapta mejor a mis condiciones y mis necesidades.

Para tomar tan importante decisión, de la que dependerá el futuro de nuestro animalito. Es importante que conozcas las características de tu nuevo compañero, a qué tipo de hábitat pertenece, que tipo de ambientes le gustan más o que tan activo es, entre otras cosas. Cosas que podrían parecer pequeñeces, pero son importantes a la hora de elegir un hábitat. El que tenga que ser más grande o más pequeña, dependerá única y exclusivamente de las características de tu mascota.

Distribución del espacio

La distribución del espacio, no solo interno sino que también en lo que se refiere al tamaño y forma del hábitat. Dependerá en gran medida del tipo de animal que adquirimos, en general podemos destinar el hábitat al menos a 4 tipos, que se pueden mezclar entre sí sin mayores complicaciones:

1. Si nuestro reptil es un trepador como: las iguanas, serpientes trepadoras, o Gecónidos. Que son animalitos muy ágiles, que pueden llegar a dejarte boquiabierto, cuando veas la velocidad con que se desplaza para sortear un obstáculo. Es preferible un terrario que tenga los espacios más altos, antes que tener más largo. Lo podemos decorar con rocas y ramas secas de tamaño acorde, en los que el animal pueda escalar y descansar durante el día refugiándose del calor.
2. Si es un animal terrestre es preferible un hábitat que tenga una mayor superficie y no demasiada altura. Deberemos recordar que debe ser proporcional a nuestro animalito, siendo necesario como mínimo, un espacio que sea el doble de grande que nuestro amigo. El decorado será en conformidad con el hábitat propio de nuestra mascota, de ser tropical o desértico lo mejor es recrear su hábitat fielmente. Para evitar el estrés que podría ocasionar, un medio distinto del aquel al que esta adaptado.
3. Si el reptil es subterráneo podría ser una mezcla entre los anteriores, y dependerá de sus características, ya que hay especies arboleas que pasan parte de su vida bajo tierra. Es importante que la capa de sustrato de nuestro terrario sea de tipo abundante, aplicando una capa de sustrato lo suficientemente gruesa como para que nuestro amigo se divierta. Ya que pasara la mayor parte de su tiempo bajo tierra.
4. Si por el contrario es acuático, pasara la mayor parte de su tiempo en un estanque. Por lo que tendrá que tener un sustrato igualmente abundante y colocar a nivel del piso, un estanque artificial para que se refresque, nade y disfrute en los días calurosos. Es importante agregar un desagüe, para facilitar las labores de mantenimiento y según sea el reptil puede ser necesario el uso de filtros especializados. No se puede descartar una combinación, con alguno de los otros 3 tipos de hábitat.

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