Escrito por Fashionatrix · 03/02/2015
Decorar un salón-comedor con chimenea no es fácil. La forma y dimensiones de la planta, la ubicación de puertas y ventanas, los ambientes que nos gustaría crear… Si distribuir y decorar un salón-comedor tiene lo suyo, en ocasiones aparecen elementos que, si bien son estéticamente muy atractivos y deseables, dificultan aún más esta tarea. ¿Cómo hacerlo cuando hay que tener en cuenta la presencia de una chimenea? Compara este salón-comedor con chimenea con la planta y superficie del tuyo para dar con una distribución cómoda y funcional.
La diseñadora Yarovikova Anna se encargó del proyecto de decoración de este apartamento, una vivienda moderna que debía responder a las necesidades de una pareja joven. Con planta estrecha y alargada, y una chimenea justo en medio del salón, la ubicación de las zonas de estar y comedor se resolvió de manera práctica. La clave, que este elemento no condicionará la distribución del salón. Se reservaron los extremos para situar la zona de estar y la de comedor (cada uno junto a un ventanal) y se jugó con la presencia de la chimenea, no sólo para crear un tercer ambiente, sino también para marcar el paso del estar al comedor.
Cuando te enfrentes a la decoración de un salón-comedor con chimenea, lo primero que debes valorar es si quieres que ésta se convierta en el centro focal de la estancia. Ten en cuenta que sea cual sea el estilo decorativo que elijas, la chimenea siempre destacará. Pero ¿quieres que sea el corazón de tu salón? Esta cuestión no sólo depende de la ubicación de los muebles; la decoración de la pared de la chimenea también es importante.
Pintar la pared de la chimenea de un color diferente al de las demás es un recurso decorativo perfecto para destacar ese frente y realzar la decoración. En este caso se cubrió con un revestimiento de fibra de vidrio con distintas texturas, que después se pintó en gris oscuro.
La zona de la chimenea se reservó para crear un acogedor rincón de lectura con un sillón de piel en color camel. Este ambiente queda delimitado no sólo por la decoración de la pared, sino también por los diferentes materiales que se emplearon para revestir el suelo: tarima de madera en todo el salón, excepto en la zona de la chimenea. El color gris de la pared se prolonga por el suelo para delimitar este ambiente de las zonas de estar y comedor.
En cuanto a la decoración del salón-comedor, la diseñadora Yarovikova Anna partió de una base neutra, con tapicerías, mobiliario y paredes en blanco, a la que después añadió pinceladas de color camel y fucsia. Además, combinó telas lisas con diseños de texturas, colores y estampados diferentes para aportar riqueza visual al conjunto. La madera presente, no sólo en el suelo, sino también en parte del mobiliario, caldea este salón-comedor. ¡Un éxito! Vía: Home-designing.