El punto de partida para decorar una habitación infantil en estilo nórdico es siempre utilizar neutros.
Y lo es básicamente para no convertir la habitación en un batiburrillo sin sentido de colores, ya que tanto la ropa, como los juguetes, libros y otros accesorios que utilizan los pequeños suelen ser coloridos y estimulantes.
Si mantenemos la base de la decoración lo más neutra posible, en blancos y beiges (suelos, paredes y techos), lo mismo que el mobiliario, podemos añadir el matiz en color en algún textil y dejar que los objetos de los niños pongan la nota de color.
Los niños están rodeados de estímulos de color y sonido constantemente y es mejor mantener el lugar donde descansan y juegan tranquilo y sin estridencias para potenciar la calma.
Olvidarse del rosa para niñas y azul para niños también es otra premisa del estilo nórdico en habitaciones infantiles, todos los colores son de todos, pero lo dicho, para la decoración neutros, para que no crezcan con esa división ridícula que la tradición ha puesto a estos colores.
No os perdáis el resto del tour de este piso sueco de 110 m² que estoy segura os va a encantar, desde el salón al dormitorio principal. ¡Feliz lunes!
Vía: Alvhem