Cuándo empiezas todo es color de rosa, piensas que lo más complicado ya ha pasado y que una vez empieces a compartir contenido de valor con tu audiencia, tu proyecto irá creciendo y escalando de forma automática.
Quién no invierte dinero, tiene que invertir tiempo. Ya te dije que ésto no es gratis y no van a lloverte los euros mientras pasas los días tirada en tu sofá rascándote la tripa.
Y quién te diga que posicionarte como referente en tu nicho y ganarte la confianza de tu comunidad online es rápido, sencillo y automático... miente. O lo ha tenido muy fácil gracias a sus contactos.
Y sí, la especialización te hará única. Porque solo conectando contigo misma, descubriendo tu esencia y la de tu idea genial, conseguirás transmitir tu verdadero mensaje al mundo. No voy a ahondar en este tema porque ya lo tratamos antes del verano.
Y ahora sí, ya estás al día, tienes la base suficiente para dar un pasito más allá de lo que hemos aprendido hasta ahora y empezar a trabajar en serio para aumentar tu visibilidad online de forma exponencial.
Todo esto está genial: especializarse, enfocarse, profesionalizar tu proyecto, monetizarlo... pero... ¿qué pasa cuándo no dispones de los recursos suficientes para invertir en mentores, herramientas y cursos? Pues que tardarás más, pero si de verdad es lo que quieres, terminarás por conseguirlo.
Si este es tu caso, querida amiga, toca ponerse las pilas y trabajar duro para avanzar y no quedarte estancada. Pero no te preocupes, vamos a ver paso a paso cómo hacerlo y las diferentes opciones a tu alcance para ser visible online sin invertir un dineral y arruinarte.
Cómo aumentar mi visibilidad online cuándo no puedo invertir recursos y dinero desde el principio
- Eliminando distracciones que te hagan dispersarte y perder el foco. No puedes dejarte llevar por la multitarea y cometer el error de realizar mil actividades a la vez para acelerar el proceso.
Cada cosa lleva su tiempo y si tú no puedes invertir dinero, asume que tendrás que invertir tiempo pero sin forzar la máquina o terminarás quemada, estresada y desmotivada. Encuentra tu ritmo, adapta tus horarios a tus necesidades y cúmplelos.
Nada de facebook, twitter, correo... cada cinco minutos. Móvil en silencio y lejos. Si no necesitas internet, desconecta el router. Avisa a tu familia y amigos de que durante esas horas, estarás incomunicada porque estás trabajando.
Imagina que solo puedes dedicar una hora al día, que tienes otro trabajo o eres madre y nadie puede echarte una mano con los niños. ¿Vas a pasarte esa hora revisando el correo y las redes sociales? ¿Respondiendo whatsapp? No, eso puedes hacerlo más tarde, mientras haces otras cosas.
Vas a tener que trabajar mucho tu fuerza de voluntad al principio, al menos hasta que estos pequeños cambios pasen de rutinas puntuales a hábitos periódicos.
Porque tu tiempo, querida amiga, es tu mayor valor. Y si no aprendes a aprovecharlo al máximo, nunca conseguirás encontrar el equilibrio entre tu vida personal y profesional, andarás como pollo sin cabeza de una tarea a otra, con todo a medias y una lista de objetivos cada vez más larga...
- Seleccionando 2 o 3 blogs de referencia, analizando su contenido al detalle, imprimiéndolo para tomar notas si es necesario y apagar el ruido exterior. Esta solución puede parecerte radical... pero es una de las soluciones más efectivas que conozco.
Deja de descargar ebooks, apuntarte a cursos gratis y empieza a ser selectiva. Trabaja para descubrir en qué etapa se encuentra tu negocio y cuáles son los pasos, por orden cronológico, que necesitas dar para pasar al siguiente nivel.
Concentra tus esfuerzos e invierte tu tiempo solo en esas fuentes de información que has seleccionado y, por favor, no te limites a leer o escuchar podcast... ¡practica! Sigue sus consejos, analiza los resultados y aplica las mejoras necesarias.
Pero ¿cómo elegir solo 2 o 3 fuentes con la cantidad de información que hay en internet? Piensa en las personas que hay detrás de ese blog. ¿Con cuál de ellas o ellos te sientes más identificada? ¿Quién se encuentra en la etapa a la que tú quieres llegar? ¿Con cuál de sus mensajes y propuestas de valor conectas mejor de forma natural?
Ahí tienes tu respuesta. Añade esos blogs a tu lector de feeds, suscríbete y síguelos en sus redes sociales. Ya tienes un par de mentores que compartirán contigo su experiencia y conocimientos a través de sus webs de forma gratuita, solo a cambio de tu tiempo.
- Buscando tu propia tribu, ese grupo de emprendedoras afines, con tus mismas inquietudes y aspiraciones. Que estén en tu misma etapa o similar, no hace falta que seáis del mismo nicho o que compartáis temática. Aquí lo que importa es trabajar en equipo.
El objetivo es hacer reuniones periódicas, exponer vuestros avances y los próximos objetivos ante el grupo. Cuándo haces una propuesta en público, siempre te sientes más comprometida a llevarla a cabo ¿verdad? Pues esto funciona igual. En la próxima reunión, tendrás que compartir tus avances.
Un grupo de mastermind es un punto de apoyo increíble, sobre todo cuándo trabajas desde casa y no tienes amigos en tu misma situación. Compartir dudas, organizar actividades en grupo, preparar lanzamientos orquestados, publicar entradas colaborativas... ¡las posibilidades son infinitas!
Tan infinitas como el nivel de compromiso y confidencialidad que debéis guardar como grupo. Las ideas que nacen dentro, se quedan dentro. Son tus compañeras, tus aliadas, tu apoyo en este viaje que acabas de comenzar. Respeta su tiempo como ellas respetan el tuyo.
- Enviando propuestas de colaboración a emprendedores con los que te sientas identificada y que tengan un público afín al que tu aspiras a llegar. Y si decides hacerlo, fuera vergüenza. Que son personas como tú, no se comen a nadie.
Recuerda: si tú confías en ti y no te valoras ¿cómo esperas que lo hagan los demás? Por eso es tan importante trabajar el punto de conectar contigo misma, descubrir tus ritmos y diseñar una propuesta de valor que transmita de verdad tu mensaje y lo que eres capaz de hacer.
¿Y cómo hacerlo? ¿Qué incluir en ese primer email de contacto? Tranquila, no te aceleres, aquí tienes el paso a paso, para que no te saltes ningún punto importante y tu propuesta de colaboración sea cautivadora.
→ Lo ideal es que conozcas y sigas al blogger con el que vas a contactar, que tengas una serie de entradas favoritas de su blog y sepas quién es, qué hace, a quién ayuda y por qué. Si no tienes estos datos, es hora de ponerse manos a la obra para conseguirlos.
→ Nada de paja, ve directa al grano. Piensa que puede que reciba una media de 50 emails al día... Si cada correo tiene 500 palabras... ¿cómo crees que estará cuándo abra el tuyo? Prepara un borrador y maquétalo como si fuera una entrada de tu blog:
Preséntate: quién eres, qué haces, por qué lo haces y a quién ayudas.
Demuestra que conoces su trabajo: recuerda cómo llegaste a su blog, que te resultó interesante y motivador, por qué decidiste quedarte y puedes mencionar el artículo que más te guste de los publicados hasta el momento.
Lanza tu propuesta: recuerda, directa al máximo. Si quieres que te responda una pregunta para un post de tu blog, dílo. Si tienes una propuesta para escribir en su blog, explícale sobre qué tema te gustaría hablar, que valor aportaría a su audiencia y las condiciones para hacerlo, en el caso de que acepte.
→ Ten paciencia. Si has escogido a un emprendedor que está en una etapa más avanzada, puede tardar hasta 2 o 3 días en responder. Si pasado ese tiempo no obtienes respuesta, puedes volver a reenviar el mensaje con una pequeña anotación preguntando si lo ha recibido.
→ Si sigue sin responder, tranquila. El NO ya lo tenías. Tal vez has apuntado demasiado alto o le has pillado en pleno lanzamiento de su próximo curso, incluso de vacaciones. Pasa al siguiente candidato de la lista y sigue el mismo proceso. No te desanimes, el SÍ llegará.
Hay un tipo de posts colaborativos muy dinámicos que no requieren tanta dedicación para participar en ellos. Son los conocidos como rounds up. El organizador lanza un par de preguntas a diferentes bloggers referentes con un punto en común y las publica todas en su blog.
- Bueno para tus colaboradores: invierten menos tiempo y es más fácil que obtengas una respuesta positiva.
- Bueno para tus lectores: es un artículo más enriquecedor al contar con diversas opiniones y varios puntos de vista.
- Bueno para ti: si consigues que al menos la mitad de los participantes lo compartan... ¡es un buen empujoncito inicial!
Para empezar a ponerte las pilas en tu estrategia de visibilidad si cuentas con pocos recursos y no puedes permitirte un curso formativo o el acompañamiento de un mentor, tienes material suficiente ¿no crees? Ya no hay excusa.
Además, si quieres profundizar en los temas más importantes, tienes varias entradas ya publicadas para ampliar información. Si no las leíste en su día, te invito a hacerlo. También están los minicursos, que como todas mis actividades grupales, son 100% prácticos.
Es decir, que tienes la teoría, tienes la práctica... yo ya más sencillo no puedo ponerlo. Bueno, sí, podría hacerlo por ti... pero tendría que cobrarte. Y si no tienes recursos, me parece que de momento esa opción la dejamos a un lado.
No te quedes paralizada ante tanta información, empieza a analizarla, aplicarla, ver resultados y trabajar con ellos para implementar mejoras. Tu negocio no va a alcanzar el éxito por mucho que leas y releas otros blogs, ebooks, cursos gratuitos...
El secreto del éxito es actuar y si lo dejas para mañana, es dinero que estás dejando de ganar hoy. Sí, dejando de ganar, porque pierdes potenciales lectores que terminen convirtiéndose en clientes felices y embajadores de tu marca.
RESUMIENDO UN POCO...
- Optimiza tu tiempo al máximo, aumenta tu productividad y trabaja para rendir más en menos tiempo.
- Selecciona a 2 o 3 mentores, sigue sus actualizaciones y pon en práctica todas sus propuestas, analiza resultados y aplica las mejoras necesarias.
- Busca aliadas, crea un grupo de trabajo activo y participativo con otras emprendedoras afines para crecer juntas y apoyaros las unas a las otras.
- Envía propuestas de colaboración a otros emprendedores y empieza a estrechar lazos con tus compañeros. Olvida la palabra competencia de una vez y vence tu miedo al NO.
Si te quedas parada, estudiando teoría que nunca pones en práctica ¿crees que alguna vez verás cambios en tu negocio? ¿que llegarás a posicionarte como especialista en tu nicho por obra de magia? ¿que aumentará tu visibilidad online sin mover un dedo?
Y para facilitarte aún más el trabajo, si prefieres leer todas las entradas que he enlazado para ampliar información en este post de seguido, te regalo un PDF dónde las encontrarás todas juntas. Ahora si que no tienes ni la excusa de que cambiar la pestaña activa del navegador para leerlas te desconcentra.
Sí, he pensado en todo, ya nos conocemos. Venga, descárgala ahora, no lo dejes para luego... que al final lo que vamos postergando se nos olvida y este tema es importante.
¿Vas a esperar a mañana una vez más? ¿O vas a ponerte ahora mismo con ello? Recuerda: tu tiempo es tu mayor valor y tu única moneda de cambio ahora mismo. Aprovéchalo al máximo y poco a poco, empezarás a ver esos cambios que tanto deseas.
Y esto no termina aquí, en nuestro grupo de trabajo en facebook, al que puedes unirte desde el botón que encontrarás en la zona inferior de esta página: HAZ CLICK AQUÍ, he publicado una foto sobre este tema dónde puedes dejarme tus dudas y consultas hasta el viernes a las 23:55 horas de Madrid, España.
Grabaré un vídeo resolviendo tus consultas y las del resto de compañeras. Y es que cuándo te dije que quería ayudarte, lo decía de verdad. Tienes dos días para preguntarme lo que quieras saber, no desaproveches la ocasión si crees que puedo ayudarte.
Y recuerda que puedes compartir esta entrada en tu red social favorita, así me ayudas a que esta propuesta de ayuda llegue a otras emprendedoras soñadoras que, como todas nosotras alguna vez, se encuentran perdidas sin saber qué camino tomar.