Más del 75 % del aprendizaje de un niño pasa por su visión. Sin ver, es difícil para los más pequeños aprender qué hacer y cómo actuar, por lo que gran parte de su desarrollo social y motor depende de sus ojos.
Según algunos estudios, uno de cada cuatro niños españoles padece algún problema en la visión, aunque no siempre es fácil para los padres descubrir que su hijo no puede ver adecuadamente, ya que los niños no son capaces de expresar sus carencias visuales, de hecho, ni siquiera son conscientes de lo que ignoran, sino que tienden a pensar que el mundo es tal y como lo perciben sus ojos.
El problema se agrava, cuando el niño todavía no habla, ya que ni siquiera puede indicar si presenta algunas molestias en los ojos.
Los padres y tutores deben estar muy atentos a ciertos signos de alarma:
- Historia de la familia: los antecedentes familiares de problemas visuales indican la necesidad de un examen de la vista completo antes de los tres años de edad. Incluso en ausencia de problemas de visión en la historia de la familia se recomienda esta prueba.
- Párpados hinchados, con costras o enrojecidas: este síntoma también podría ser un signo de alergias si su hijo es propenso o síntoma de infección, en otras ocasiones es indicio de problema en la visión. De cualquier manera el médico puede prescribir las gotas adecuadas para los ojos de su hijo.
color de la pupila. Cuando la pupila se torna de color blanco, podría indicar un tipo de cataratas, por lo que es importante consultar al pediatra cuanto antes
- Frotar, parpadear, o apretar los ojos: en muchos niños, esto es una señal de cansancio, hambre o incluso de presencia de alergias. Sin embargo, estos comportamientos también son comunes en los niños que tienen dificultades para enfocar su visión.
- Guiñar mucho el ojo: a veces un niño puede cerrar un ojo al leer o mirar la televisión debido a visión borrosa o doble
- Los dolores de cabeza: en ocasiones, los dolores de cabeza en los niños son un signo de tensión en el ojo, ya que mirar hacía una página o una pizarra puede suponer un esfuerzo para sus ojos con dificultad de visión. Esta es probablemente la razón por la que muchos problemas de la vista no se conocen hasta que el niño está en la escuela.
- Comportamiento extraño: algunos niños con problemas de visión, pueden parecer hiperactivos o tener trastorno por déficit de atención, ya que el problema de visión puede afectar al comportamiento. Es aconsejable que el especialista lo valore mediante un examen de la vista y verifique si cualquiera estas patologías se presentan conjuntamente.
Si usted percibe cualquiera de estos signos en su hijo, especialmente si se presentan en momentos diferentes a la siesta o la hora de acostarse, es posible que el niño padezca algún problema de la vista, por lo que ha de consultar lo antes posible con el pediatra.