Cómo elegir esmaltes o pinturas para azulejos

Las pinturas para azulejos ofrecen una excelente adherencia y un acabado más duro y elástico que otro tipo de materiales. A continuación te damos las claves para que sepas cómo elegir las pinturas para azulejos ideales en cada ocasión.

En primer lugar, conviene diferenciar entre dos tipos de pinturas para azulejos.

Las pinturas para azulejos a base de aceite

También son conocidas como esmaltes sintéticos y dan un acabado más brillante. Se limpian con aguarrás o disolvente. Se secan rápidamente, aunque con el tiempo pueden amarillear como consecuencia del disolvente, así que vete con cuidado con este tipo de pinturas para azulejos. Resisten la humedad y se usan en lugares de la casa con alto tráfico, como son la cocina y los baños. Estas pinturas para azulejos también están recomendadas para puertas y marcos de ventanas.

Las pinturas para azulejos a base de agua

También son conocidos como esmaltes acrílicos y no dan un acabado excesivamente brillante. Resisten las manchas y son lavables, ya que basta con limpiar con agua y jabón. Estas pinturas para azulejos se secan más lentamente que las que son a base de aceite, pero en cambio no amarillean. Al no contener disolventes huelen menos y son más respetuosos con el medio ambiente.

¿Sobre qué superficie puedo aplicar las pinturas para azulejos?

Las pinturas para azulejos y muebles pueden aplicarse sobre diversos materiales: azulejos de gres, cerámica, loza. Y pueden usarse en el baño, la cocina u otras estancias de interior. Lo importante es limpiar y desengrasar perfectamente la superficie para, seguidamente, aplicar la pintura para azulejos correctamente y con garantías.

Las pinturas para azulejos destinadas a muebles se pueden utilizar sobre melanina, aglomerados o incluso madera maciza. Para encimeras enceradas es necesario lijar previamente la madera y desengrasar la superficie con un trapo empapado en acetona.

Además, permiten que se coloquen sobre ellas otros elementos decorativos como pegatinas, vinilos, cenefas o cualquier dibujo hecho con plantillas.

Las ventajas de las pinturas para azulejos

Son lavables, soportan la humedad, se aplican directamente sobre la superficie (dado que no necesitan una capa previa de imprimación), ofrecen un acabado uniforme sin marcas de rodillo o brocha y cuentan con una amplia gama de colores. Además, se pueden mezclar entre sí para crear tonalidades nuevas. Aprovecha esa posibilidad para dar rienda suelta a tu creatividad y fabricar colores inimaginables. Por último, ofrecen un acabado satinado, aunque para conseguir un acabado mate o brillante (lacado) y mejorar la resistencia puedes aplicar un protector específico para este tipo de pinturas.

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