A veces la parte que más se complica de la historia que estamos escribiendo es la elección del título para nuestro libro. Un buen título atraerá al lector a nuestro libro, creará en él la necesidad de saber más de él, de leerlo cuanto antes. Un buen título debe sugerir, según el estilo de la obra, y debe intrigar a nuestros futuros lectores sin desvelarles los misterios encerrados en ella.
¿Qué hacer? Mis recomendaciones son las siguientes: 1. Huyamos de títulos generales, títulos que podrían usarse para cualquier otro relato o para cualquier otra cosa. El título debe decirnos algo de la historia para animar a nuestros lectores a que quieran conocerla, siempre siguiendo el tono de la historia: suspense, humor, romántica, histórica... 2. Busquemos en nuestros textos. Podemos elegir como título alguna de las frases de nuestro libro, una frase que defina el tema o un diálogo que aparezca en él y sea sugerente. 3. Usemos nombres, lugares, fechas, horas... detalles concretos y precisos que contendrán la esencia de la historia. 4. Hagámonos las siguientes preguntas: ¿qué cuenta nuestra historia? ¿qué queremos transmitir? Y a partir de aquí elaboraremos una lista con todo lo que se nos vaya ocurriendo y pueda servirnos para elaborar nuestro título. 5. Intentemos sorprender a nuestros lectores seleccionando un título original y extraño, para lograr despertar la curiosidad por nuestra historia. Ejemplo: La soledad de los números primos de Paolo Giordano. 6. Utilicemos contrastes. Un título que llamará la atención totalmente al contener conceptos opuestos. Ejemplo: Cinco moscas azules de Carmen Posadas. 7. Revisemos trabajos de otros escritores. Podemos analizar obras similares a las nuestras y estudiar como sus autores han creado sus títulos. Libros que han gustado a lectores, libros que han enganchado a través de buenos títulos. Confío en que mis recomendaciones os ayuden, y espero que aportéis las vuestras... Pensad que un escritor que ha trabajado en la elección del título, es un escritor que ha trabajado en su historia, y ofrecerá un gran libro. Un buen título hará que deseemos conocer la historia, conseguirá atraer al lector. El título es la primera puerta del libro.