Este es un niño que viene a mi consulta, simpatiquísmo y listísimo. La familia lo encuentra más bien "esmirriado" "desde que nació". Le pedí a su madre que me enviara una foto para ponerla en este blog y ha sido muy amable en hacerlo. Con esta imagen intento, una vez más, convencer a padres y abuelos que me leen de una máxima infalible:
"Al niño al que NO se le notan las costillas le sobra peso"