Hace unos cuatro años estrenaron una película de animación en cines de la mano de Dreamworks llamada ‘Cómo entrenar a tu dragón’ y me decidí ir al cine a pagar por ver ‘Furia de titanes’ ya que se estrenaron por la misma época, fui bastante iluso y la dejé pasar. Tras verla un tiempo después quedé gratamente sorprendido hasta el límite de considerarla entre las cinco mejores de esta factoría de animación. Consiguieron crear una posible franquicia llena de amor, aventuras, épica y emoción y así he estado esperando la secuela hasta que por fín con unas buenas expectativas pero algo inferiores debido a los comentarios de la gente he conseguido disfrutar de una secuela aún superior.
‘Cómo entrenar a tu dragón 2′ comienza con estilo infantil ya típico de las aventuras de acción, carreras, competiciones, ovejas por los aires, dragones en estado de gracia y de manera que parezca una secuela relajada y alegre. La cinta empieza bien pero no a la altura de la primera, sigue manteniendo un buen ritmo, tanto que cuando miro el reloj, algo habitual que suelo hacer pero no es sinónimo de aburrimiento si es que algunos piensan así y habían pasado ya 70 minutos por lo cual era señal de que se me estaba haciendo corta y amena. Nuevos personajes, un buen sentido del humor aunque en este caso sea algo inferior a la primera en ese aspecto aunque ya se ve que tanto esta como su predecesora no gozan de mucho humor gamberro sino que tira más para la emoción, la épica y el drama. Si en la primera veíamos la alianza entre dragones y humanos para deshacer ese conflicto histórico de tantas guerras y luchas contra esos adorables seres, en esta pasamos a un enemigo de humanos, un villano a la altura que es capaz de cometer atrocidades sin apenas mover un dedo. Dominado por el sorprendente dragón Alpha, la cinta goza de un estado épico y emocionante que dotan de realismo y valentía a una trama aparentemente gastada e innecesaria. Cuando menos te lo esperas, el guión da un giro que sorprende y emociona, la banda sonora maravillosa de John Powell acompaña y ayuda mucho a que esas lágrimas empiecen a florecer.
No solo son destellos de calidad, es una secuela a la altura de la primera e incluso mejor, podría considerarla la mejor de animación de este año y del anterior. De las mejores películas de Dreamworks que pese a desentender la relación entre Hipo y Astrid que se queda en una mera secundaria de relleno ya presentada y con mucho protagonismo en la anterior, en esta queda relegada por el círculo familiar que ahonda de forma profunda en Hipo, en la relación a ratos trágica con Desdentao quien saca sonrisas por doquier y por supuesto en el nacimiento de un líder, en la responsabilidad de mantener a salvo a tu raza, a tu pueblo.
En definitiva, ‘Cómo entrenar a tu dragón 2′ es una fantástica historia conmovedora, emocionante y épica a partes iguales que realza en valor del héroe, de la amistad y de las segundas oportunidades. Una cinta profunda y diferente con respecto a la primera, una sorpresa inesperada que encantará a pequeños y emocionará a mayores.