En todos los foros de padres las consultas y los comentarios se refieren al niño pequeño. En cambio, al pasar la frontera de "los resfriados continuos", el nivel de las dudas de los padres desciende. Veamos cómo es y qué han de hacer los padres a esa edad.
Un niño de seis años esta impaciente por actuar de forma independiente, pero no está todavía capacitado para tomar con lógica unas decisiones correctas. Le gusta subir a los arboles, dar saltos, brincos, correr y bailar al compás de la música. La mayoría tienen un buen sentido del equilibrio y pueden sostenerse sobre una pierna. Manipulan mejor sus dedos y son capaces de atarse los cordones de los zapatos, subir cremalleras o abrocharse los botones de la ropa, y juega con otros niños lugares comunes. Está en fase de aprendizaje sobre la seguridad - al cruzar las calles, llevando una bicicleta o tratando con extraños. Antes de que los padres de empiecen a dejarle salir solo por los alrededores, debe ser capaz de recordar y entender las normas de seguridad y han de continuar estableciendo limites adecuados mientras a pesar de animarle a ser más independiente.
Los amigos y otras personas son cada vez más importantes en su vida y salir juntos grupos de familias con niños de la misma edad estimula sus amistades y aprende a respetar la creciente influencia de sus nuevos amigos.
Un niño de seis años está interesado en probar los limites de su cuerpo.¿Qué velocidad alcanza corriendo? ¿Hasta adonde puede llegar tirando un balón? "Mira lo que hago" es una frase bastante común a estas edades para demostrar su "poderío". A medida que aprende como funciona su cuerpo, gana la confianza y la habilidad necesarias para participar en actividades tales como fútbol o danza. Las bicicletas deben ajustarse al tamaño del niño y a su nivel de capacidad llevando siempre un casco adecuado. A veces es difícil programar las diferentes actividades extraescolares y los papás han de estar al tanto en no exigirle más de lo que puede dar.
En la consulta al niño le gusta que me dirija a él y lo incluya en la entrevista; le animo a que me cuente cómo le va en el cole, cómo se llaman sus amigos, si colabora en sus responsabilidades al vestirse, al ir a dormir y a los hábitos de higiene. Esta confianza le ayuda a a promover la autonomía, independencia y sentido de dominio.