Revista Comunicación

Cómo escribir mejores posts

Publicado el 14 octubre 2014 por Lorena White @lorenagwhite

Ya sabéis que soy defensora de la afirmación de que “El contenido es el Rey”. Un blog con un contenido interesante, que no sólo no aburra sino que conquiste a los lectores y que tenga la capacidad de enganchar desde el titular, es un blog destinado al éxito. Sin embargo, tan importante es lo que se cuenta como el cómo se cuenta, y en esta materia, saber utilizar las palabras para nuestro beneficio, es una de las aptitudes que todo bloguero debe entrenar.

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Hoy te traigo 10 aspectos a tener en cuenta a la hora de redactar las entradas para tu blog. Y una regla de oro: ante todo, escribe para ti, pero piensa en el lector. Con esto me refiero a que el tema que trates debe, como siempre defiendo, apasionarte; pero eso sí, no lo escribas de forma que sólo tú lo entiendas o que sólo a ti te emocione. Busca, experimenta y prueba con todas las formas posibles de llegar al lector partiendo de estas premisas:

1. Cuida tu ortografía: los errores en la ortografía pueden repeler incluso al lector más voluntarioso. Por otro lado, ahora que escribir mensajes no cuesta dinero, eso de abreviar las palabras está más pasado de moda que nunca. Nunca defendí su uso en blogs o foros, donde uno tiene espacio ilimitado, pero mucho menos puedes escribir así en un blog al que quieres relacionar contigo, con tu forma de ver tal o cual tema, con tu vida profesional, con tu marca personal. No maltrates las palabras.

2. No seas repetitivo: cuesta (a mí la primera), pero intentar no repetir ni palabras ni conceptos, es una de las cosas con las que mejor se puede entrenar la escritura. Por eso escribir un blog ayuda a nuestro vocabulario, porque siempre habrá sinónimos que utilizar, frases que estructurar, nuevos temas que abordar con nuevos términos. Intenta no repetirte y estrujarte la mente para que tu contenido sea nuevo siempre y más innovador que el anterior cada vez, que ya sabes lo que pasa cuando se repite el ajo, o el chorizo del cocido.

3. Usa tu propio estilo: los lectores rechazan las imitaciones, y los blogs y blogueros clónicos. Es importante tener una voz propia para que nuestros posts tengan más éxito cada vez. Alguien entre vosotros me ha comentado alguna vez, cuando he hablado de la voz y el estilo propio a la hora de escribir, que es una de las cosas que más cuesta. Saber expresarse por escrito y hacerlo de forma única, es complicado, pero para eso uno tiene un blog, para ir mejorando y puliendo su estilo. La mejor forma para aprender, es practicar, es ley de vida.

¿Sabes qué? Una de las mejores tácticas para entrenar esto del estilo propio es intentar escribir tal cual se habla, como si se hablara a un amigo. Inténtalo en tu próxima entrada, no utilices tecnicismos que tú no usarías y procura que tu trato hacia el lector sea personal y coloquial (por supuesto, sin caer en el “eh, tronco, ¿qué pasa?”).

4. Utiliza frases cortas: las frases interminables dejan sin respiración al lector, aunque éste no nos lea en voz alta. Se hacen pesadas, hacen que perdamos el hilo del tema y vuelven nuestro texto más confuso, menos limpio.

5. Concreta. Ve al grano: una de las cosas que he aprendido gracias a escribir casi todos los días en un blog, es a sintetizar la información (lo sé, se supone que a los Periodistas nos enseñan eso en algún momento, pero es mentira, en realidad, como tantas otras cosas, se aprende a base de probar y repetir, probar y repetir). Y es que, ¿por qué usar dos palabras si basta una sola?

6. No tan rápido: una cosa es ser concreto y otra soltar el rollo rápido y no fijarse siquiera en las pausas necesarias para cualquier texto. Aprende a situarlas allá donde tu entrada las precise. Las comas y los signos de puntuación sirven para que un texto se lea con fluidez y el lector no se ahogue (aunque lea “para dentro”).

7. Estructura tus entradas: muchas veces creemos quCe escribir un blog es sentarse y darle a la tecla hasta que llegamos al final, sin pararnos a pensar en la estructura. Sin embargo, la estructura es muy necesaria a la hora de guiar a nuestro lector por el texto. Una entradilla que introduzca el tema, una fotografía que sea atractiva y que invite a leer más y unos párrafos debidamente separados, pueden ayudar al lector a no perderse entre las letras ni a cansarse demasiado.

8. Muchos adjetivos, poca diversión: no por más adjetivos calificativos que utilices para describir una cosa apasionante, emocionante, maravillosa, estupenda y divertidísima va a ser mejor y va a mejorar tu vocabulario. Aprende a limitar los adjetivos. Si flaqueas en este punto y quieres hacer la prueba, revisa alguno de tus primeros textos y quita todos los adjetivos calificativos salvo los estrictamente necesarios. Verás que las frases siguen teniendo sentido sin ellos.

9. ¿Has oído hablar del storytelling? Es una técnica heredada de la publicidad que consiste en persuadir contando una historia en vez de persuadir contando las bondades y virtudes de un producto, de tal forma que ya no se manda el mensaje único de “COMPRA MI PRODUCTO PORQUE ES EL MEJOR” sino que se busca conectar con el usuario de una forma mucho más personal, buscando despertar sus sentimientos y emociones “DESCUBRE POR QUÉ A FULANITO LE CAMBIÓ LA VIDA ESTE PRODUCTO Y CÓMO TE PUEDE CAMBIAR A TI”. ¡Boom! ¿Has notado el cambio? Adaptada a un blog, la técnica del storytelling puede ser la ténica ideal para enganchar al lector, con entradas que tengan una estructura de presentación, nudo y desenlace, por ejemplo. Y sobre todo, buscando llegar al corazoncito del lector.

10. Edita, edita, edita: que no te dé miedo borrarlo todo y volver a empezar. Revisa tu artículo antes y después de publicarlo, busca cómo mejorarlo, no te conformes jamás con la primera versión y, sobre todo, esfuérzate cada día por escribir mejor. Porque, y seguro que esto te lo han dicho diez millones de veces pero, a escribir se aprende escribiendo.


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