Como estimular y mejorar la coordinación y psicomotricidad de nuestros hijos

El movimiento es vida y es que siempre nos gusta jugar y movernos, por eso desde que nacemos y somos bebés estamos evolucionando y aprendiendo, adquirimos habilidades y coordinación que nos permiten movernos e interactuar en todos los ámbitos de la vida. Hoy desde el blog de LaCestitadelBebe vamos a ver como estimular y mejorar la psicomotricidad de nuestros peques.

Desde que somos bebés cada movimiento tiene una razón de ser, es una adaptación y progresión de todas las habilidades incluyendo por su puesto la motora. Como a todos siempre estas predispuestos para unas actividades que otras, pero es necesario potenciar todas sobre todo en las que somos más débiles.

Si vuestros peques van a la guardería ya están recibiendo formación y estimulación mediante ejercicios a modo de juego para ir desarrollando y mejorando poco a poco las habilidades motoras básicas.

Así que vamos a ver cuáles son las principales habilidades y algunas directrices para fomentar su mejora y estimulación que sin duda les vendrá genial.

Las capacidades motrices

Las principales capacidades de movimiento son las que usamos día a día y que instintivamente vamos adquiriendo y mejorando desde que somos bebés. Pero como todo en esta vida necesita ser entrenado para alcanzar las mayores cualidades y conseguir la mayor parte de potencial. Estas actividades comprenden desde manejar cosas con las manos y dedos, tijeras, lápiz, pinturas, punzones, a andar, correr, botar una pelota o dar saltos entre otras.
La mejor forma de practicarlas o mejorarlas es mediante las manualidades y el ejercicio físico para adquirir la destreza y fuerzas necesarias para desempeñarlas de una forma perfecta.
Vamos a pasar a ver las nuestras habilidades motoras que nos caracterizan como seres humanos y que potenciamos desde peques.

Principales habilidades motrices

Las tareas motrices son las habilidades básicas que todo niño desarrolla poco a poco a medida que crece. ¿Sabrías decir cuáles son?
Según los expertos en actividad física del deporte, las habilidades motrices son todos aquellos patrones de movimiento que realiza el ser humano. Se dividen en los siguientes grupos más generales:
Desplazarnos y subir y bajar escaleras
Cuando somos adultos desplazarnos y andar no nos suele suponer ningún esfuerzo, porque contamos con la coordinación de la gran cantidad de músculos y extremidades necesarias para poder movernos en nuestro espacio.
Cabe destacar los distintos tipos de movimientos de este grupo, correr, deslizarse, andar, marcha, reptar o andar a 4 patas.

Saltar

Es otra de las principales capacidades motoras que nos caracteriza y es que despegar los pies del suelo al mismo tiempo y aterrizar correctamente requiere mejorar de coordinación y fuerza para despegarnos de la tierra lo suficiente.
Para potenciar esta habilidad lo mejor son los ejercicios y juegos, que combinen saltos a la pata coja, andando y con pies juntos.

Dar giros

Es otro movimiento que muestras nuestras capacidades motoras y se trata básicamente de realizar rotaciones sobre cualquier eje del cuerpo. Pudiéndose llevar a cabo con los pies y las articulaciones y nos ayudan a mejorar en coordinación, estiramientos y control de nuestro cuerpo.
Son varios los tipos de giros que van desde los sagitales o rotacionales del cuerpo entero a los transversales y longitudinales.

Lanzar una pelota

Otro de los movimientos que integran nuestras capacidades motores básicos es la capacidad de poder lanzar objetos. Aquí se unen las fuerza con la coordinación pudiendo lanzar el objeto con una o ambas manos. Así mejoramos fuerza para la distancia, precisión y la velocidad para alcanzar las metas deseadas.

Recepcionar un objeto lanzado

Otra de las habilidades básicas que se trabajan en las clases de psicomotricidad es la de coger un objeto que nos han lanzado. Se puede practicar este ejercicio en parado y en movimiento, siendo un ejercicio de precisión siguiendo la trayectoria del objeto para finalmente cogerlo.

Cómo ejercitar y mejorar estás habilidades

Como hemos comentado anteriormente desde que nacemos y somos bebés vamos haciendo ejercicios y aumentando nuestra motricidad como la evolución de rotar, gatear y andar.
Aunque sean innatas estas capacidades se pueden mejorar y entrenar a nivel individual median ejercicios específicos que ya les hacen los pedagogos durante su estancia en la guardería y el colegio. La asignatura de educación física también sigue durante loes estudios de secundaria y bachillerato.

Desarrollando las habilidades competentes

Vamos a dejaros una lista de actividades y ejercicios que mejoraran las habilidades de vuestros peques y que pueden realizarse desde los 4 años de edad. De esta forma adquirirán más fuerza, conocerán mejor su cuerpo y sus posibilidades y les ayudará a desenvolverse mejor en sus tareas cotidianas.

Los ejercicios son, siempre teniendo en cuenta la edad y su grado de desarrollo:
Columpiarles
Jugar en parques con juegos de trepar y toboganes.
Trepar por escaleras y redes.
Juegos como el balón prisionero donde se lanzan y recepcionan las pelotas.
Juegos con yincanas, donde se trepa, se repta, se corre, se esquivan y recogen cojas.
Jugar a juegos como el chocolate inglés, la gallinita ciega y el pañuelo.
Lanzar bolas de papel como si fueran bolas de nieve.
Recortar dibujos y pintar.
Actividades al aire libre, como correr, nadar, patinar, salir en bicicleta.

Diferentes etapas de desarrollo de las capacidades motrices

En nuestro crecimiento, desarrollo, evolución y aprendizaje vamos teniendo diferentes etapas de aprendizajes.

Son de reseñar las que se producen en la educación primaria que se dan entre los 7 y 8 años y donde los peques van mejorando sus habilidades de forma natural. Además en el cole les dan educación física y mediante juegos refuerzan y mejoran estas habilidades. Juegos como la rayuela, saltar a la comba, correr, saltar y el balón prisionero suelen ser los que se inculcan en estos rangos de edades.
Es recomendable realizar también actividades por si mismos fuera del cole, como montar en bicicleta, correr, baloncesto o futbol que mejoran sus competencias y les ayudar a adquirir más destrezas y valores como jugar en equipo.
Cuando entran en la adolescencia, período comprendido entre los 13 y 17 años, la mayoría ya tienen un gran control y conocimiento de sus propios cuerpos. En esta etapa en el instituto se les enseña otros deportes como voleibol, tenis, bádminton y baloncesto que les ayuda a seguir mejorando en las destrezas motoras.

Principales diferencias entre destrezas y habilidades

Para acabar es importante que tengamos en cuenta las diferencias que se dan entre habilidad y destreza. Son útiles en el movimiento y desempeñan un papel fundamental en la práctica de ejercicios.
La destreza es la habilidad que implica el uso y manipulación de objetos, por ejemplo en los movimientos de lanzar y recepcionar la pelota.
Por otro lado, la habilidad es la capacidad que tiene una persona para interactuar con su entorno mediante los movimientos y los desplazamientos. Es un mecanismo de percepción para poder moverse con total control.
Es de vital importancia que ya desde pequeños trabajen y mejoren sus capacidades motoras mediante el ejercicio físico y una buena alimentación que les permita crecer y desarrollarse explotando todo su potencial.
Esperamos que el artículo os sirva para mejorar en los movimientos de los peques y de paso paséis buenos ratos practicando ejercicios y juegos.

Cuidaros mucho que ya llega el frío y nos leemos en la próxima ocasión!

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