Algunas de las razones para que se produzca esta situación en los bebés son: el consumo de tabaco en la madre, abrigar demasiado al bebé o dejar al bebé durmiendo boca abajo.
Para evitar la muerte súbita en lactantes o bebés se debe acostar al bebé boca arriba o de costado, nunca boca abajo, aunque sí que se le puede dejar descansar boca abajo siempre bajo supervisión de alguna persona adulta. Además se recomienda utilizar un colchón adecuado al bebé, que no sea demasiado blando y con la dureza adecuada. Las sábanas y mantas deben estar bien para que no se enreden, y deben ser suficientes pero no abusar de ellas. El bebé también debe dormir con el rostro descubierto. Se recomienda también dormir cerca del bebé.
No hay que abrigar demasiado al bebé, ni tener demasiado calor en la habitación o lugar en que esté el bebé. Debe haber la temperatura adecuada.
No hay que fumar delante del bebé, ni los padres ni ninguna otra persona, y tampoco se debe fumar durante el embarazo ya que puede hacer daño al bebé, concretamente triplica los riesgos de síndrome de muerte súbita en bebés.
Se recomienda también controles pediátricos frecuentes y respetar el calendario de vacunación de los niños. Es necesario que los padres conozcan las razones que dan lugar a este síndrome de muerte súbita para poder evitarlo, ya que como podemos ver es algo que en muchos casos puede solventarse.
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