Con la llegada del calor aumentan los casos de insolación o golpes de calor. El año pasado, el Hospital de Bellvitge de Hospitalet de Llobregat (Barcelona) publicaba un estudio en el cual se destacaba que la mortalidad producida por un golpe de calor puede llegar a superar el 70% de todos los casos afectados por insolaciones.
Este informe destaca que tanto la tercera edad como bebés y niños son considerados población de riesgo de insolaciones y golpes de calor y por ello se recomienda un cambio en la dieta y en los hábitos con el fin de prevenir la deshidratación y la hipertermia.
¿Por qué se producen los golpes de calor? Cuando el cuerpo padece una subida en la temperatura corporal superando los límites normales, impidiendo que el cuerpo de forma natural pueda autorregular estos cambios de temperatura.
¿Cómo se detecta? Los golpes de calor suelen reconocerse por tener una piel muy caliente, jaquecas, pérdida de conocimiento, dificultad respiratoria, pulso acelerado, mareos, debilitamientos, etc.
¿Cómo evitar los golpes de calor? A continuación compartimos algunos consejos para evitar insolaciones durante el verano:
- Beber entre 2 – 2,5 litros de líquido a lo largo del día.
- Seguir una dieta ligera, rica en frutas y verduras.
- Llevar una vestimenta liviana.
- Evitar la exposición al sol en horas pico (13 – 16 horas)
- Uso de protección solar: cremas, gorros, sombrillas, etc.
Este verano cuida tu salud y protégete del calor: hidrátate y evita los golpes de calor. Si practicas ejercicios al aire libre, toma precauciones.
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