La advertencia ha sido, por primera vez adoptada oficialmente por la Academia Americana de Pediatría, como uno de los pasos clave para la prevención de muerte súbita. Otros incluyen a poner al bebé a dormir sobre su espalda, no dormir con su hijo y no fumar en la misma habitación que él o ella.
"Hemos sopesado los pros y los contras y las pruebas, y consideró que lo más seguro sería quitar estas defensas de todas las cunas", dijo el Dr. Fern Hauck, un portavoz de la Academia y profesor de medicina familiar en la Universidad de Virginia.El número de muertes súbitas se ha reducido drásticamente desde que a los padres se les aconsejó a principios de 1990 que los bebés deben dormir boca arriba. Las últimas cifras muestran 316 bebés menores de un año fallecidos de muerte súbita en el Reino Unido en 2009.
Un informe publicado en la revista Journal of Pediatrics en 2007 encontró que 27 niños estadounidenses menores de dos años murieron ahogados entre 1985 y 2005, después de atascarse contra un tope acolchado o de ser estrangulado por una ligadura del protector al enroscarsele alrededor del cuello.
Fuente: dailymail