Cualquier ciclista, ya sea profesional o amateur, que tenga una planificación de sus entrenamientos para llegar a un rendimiento óptimo en un momento determinado de su temporada tiene que tener también en cuenta en esa planificación la recuperación muscular.
La recuperación muscular es básica para evitar los síntomas negativos que tiene en el organismo de los deportistas el sobreentrenamiento. Y es que para que los músculos asimilen correctamente el trabajo que se está realizando en los entrenamientos tienen que recuperarse correctamente de los esfuerzos.
Beneficios para para el organismo
El hacer correctamente la recuperación muscular tiene muchos beneficios para el organismo, como la prevención de lesiones y la recuperación más rápida de la musculatura, lo que permitirá que estemos en óptimas condiciones de volver a hacer deporte más rápidamente que si no se hiciera dicha recuperación.
Para realizar una recuperación muscular de manera correcta hay que combinar diferentes factores.
Alimentación
El primer paso para que los músculos se recuperen correctamente después de hacer ejercicio es una correcta alimentación. Con ello conseguiremos aportar a nuestra musculatura los nutrientes para que se regenere y pueda estar a pleno rendimiento rápidamente.
Esta alimentación debe basarse principalmente en hidratos de carbono, proteínas y sales minerales.
La alimentación para recuperarse muscularmente se puede hacer mediante alimentos naturales o bien con preparados específicos denominados " Recovery", que nos van a aportar todos los nutrientes necesarios.
Estiramientos
Realizar estiramientos de la musculatura, principalmente de las piernas, también es fundamental para una correcta recuperación muscular, ya que éstos activarán el riego sanguíneo que llega a los músculos y con ello los nutrientes llegarán más rápido.
Seguramente hemos visto en alguna carrera como el tour de Francia a los ciclistas profesionales meter las piernas en una especie de sacos térmicos. Pues esos sacos son sacos de frío que ayudan a la recuperación muscular.
Esa técnica equivaldría a un baño de agua fría o con hielos. La clave no es el baño de frío en sí, sino que al quitar el frío se produce un cambio drástico de temperatura que activa la circulación sanguínea en las piernas, aumentando por lo tanto el aporte de oxígeno y acelerando la recuperación.
Masajes de recuperación muscular
Los masajes, realizados siempre por profesionales, acelerarán el riego sanguíneo de la zona, aumentando también el aporte de oxígeno a los músculos.
Prendas de compresión
En el caso de que no nos puedan dar un masaje, que en el caso de los aficionados sería lo más habitual, se puede recurrir a las medias de compresión. Estas prendas aumentan el riego sanguíneo de la zona, produciéndose una mayor oxigenación y una recuperación más rápida.
Fuente vídeo:
Alvaro Molinos