• Eligiendo colores navideños como el rojo y el verde. Lo clásico siempre está de moda.
• Poniendo detalles en cada una de las sillas como en este caso que eligieron unas ramitas y las ataron con un lazo rojo. El hecho de que sea natural y la combinación de colores es clave.
• Presentando el menú encima del plato envuelto en la servilleta como si de un regalo se tratase.
• Utilizando una cubertería más especial para la ocasión en oro viejo.
• Iluminando la mesa con candelabros. En este caso del mismo color y líneas sencillas.
• Decorando con detalles naturales el centro de la mesa. Ramas, jarrones con flores o un tronco para apoyar los platos calientes.
• Y sustituyendo el tradicional mantel por un camino de mesa de cuadritos.
¿A que no parece complicado a simple vista?
¡Feliz lunes! Imágenes: Rue Mag