Revista En Femenino

Cómo influyen los cambios hormonales en tu humor

Por Mamikanguro @MamiKanguro

Pareciera ser que la nueva forma de llamarnos “histéricas”, “locas”, “exageradas” es decirnos Tiroideas. Si, así como lo leen. Tiroideas. Un famoso médico se lo dijo a famosa periodista en tv y desde entonces es muy común escucharlo como si fuera un adjetivo calificativo. Yo soy hipotiroidea y debo reconocer que en mi, las variaciones en el funcionamiento de la tiroides, afecta mi humor. ¿Pero es así en todas las mujeres?

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El carácter de la mujer refleja fielmente los cambios endocrinos. En poco tiempo puede pasar de la euforia a la depresión. La mujer es voluble, ya que por su condición femenina esta sometida a mas cambios hormonales que el hombre, y estos se acusan, a veces, en el carácter.

Las variaciones de carácter en la mujer suelen tener relación con el ciclo hormonal menstrual.

Cuando el nivel de estrógenos esta mas elevado, la mujer se encuentra mucho mejor física y anímicamente, y sexualmente es mas receptiva. Se nota con fuerzas para todo, algo asi como que podria comerse el mundo. Sin embargo, en los días siguientes a la ovulación y anteriores a la regla, que es cuando esta mas bajo el nivel de estrógenos, experimenta una serie de cambios. Es posible que afloren, entonces, sentimientos de tristeza, irritación, apatía y cansancio.

Síndrome de mujer

Si esta situación toma características patológicas, configura lo que se conoce con el nombre de síndrome premenstrual.

Las hormonas sexuales son estimuladas por el hipotálamo (situadas cerebro) y las gonadales (ovarios en la mujer y testículos en el hombre). En ambos sexos se segregan hormonas masculinas y femeninas, aunque en menor proporción las que no son propias de nuestro sexo. Los andrógenos son las hormonas masculinas; la mas importante de ellas es la testosterona. Esta parecería estar directamente relacionada con los comportamientos mas agresivos, de ahí que, en general, el hombre sea mas violento.

Las hormonas femeninas por excelencia son los estrógenos, que participan en la regulación del ciclo menstrual e influyen sobre la ovulación y el embarazo, entre otras muchas funciones. Actúan directamente sobre el estado de animo y el deseo sexual.

Empiezan a segregarse en cantidades cada vez mayores a partir de la regla y alcanzan su máxima expresión con la ovulación, luego de lo cual disminuyen bruscamente para luego alcanzar valores mayores 72 horas mas tarde. Desde ese momento, aumentan los niveles de progesterona, hormona que se ocupa de preparar el útero para que anide el embrión en caso de que se produzca la fecundación.

En el embarazo se produce una gran revolución hormonal. Los estrógenos se hallan en su máxima expresión, de ahí que, anímicamente, la mayoría de las embarazadas se encuentren muy bien. Estos cambios hormonales inciden sobre el sistema inmunológico o defensivo. No se sabe muy bien como, pero el hecho es que, ciertas defensas bajan de manera muy selectiva, para aceptar eso nuevo y extraño que es el feto.

En el embarazo hacen estragos…

Del mismo modo, durante el embarazo la carga hormonal es un factor importante. La mujer empieza a producir progesterona y estrógenos, los cuales influyen en el conjunto de cambios biológicos de esta etapa; el cuerpo de la mujer cambia y psicológicamente surgen reacciones frente a estos cambios de humor que se reflejan en el estado de ánimo.

Durante el embarazo, la futura madre recapitula su propio nacimiento así como su relación con su propia mamá. Se enfrenta a sentimientos de ternura y cariño que, poco a poco, se van dirigiendo hacia su hijo; y, a la vez, se enfrenta al temor y creciente responsabilidad que esta situación le representa.
Estos sentimientos ambivalentes se expresan en su estado de ánimo. Algunas embarazadas pueden pasar de una intensa felicidad a un estado de preocupación o temor ante la nueva situación, incluso pudiendo derivar en Depresión Postparto; otras mujeres se pueden sentir muy bien, transmitiendo el embarazo como la mejor etapa de sus vidas. Esto no quiere decir que no se enfrenten ante esta ambivalencia natural si no que tal vez reprimen más la sensación de incertidumbre.

La forma en que cada mujer enfrenta y vive su embarazo tiene que ver con varios factores que van desde cómo se dio esta situación, la elección de pareja, la edad de la mujer y su momento de vida, hasta si el embarazo fue deseado y buscado o fue algo que no se planeó, si la mujer embarazada cuenta con el apoyo de su pareja o es madre soltera, si cuenta con capacidad económica para cubrir las necesidades básicas del bebé o no, etc.

Revolución hormonal también tras el parto

En el posparto el nivel de estrógenos desciende considerablemente, lo que justifica la frecuente depresión que muchas mujeres sufren tras el nacimiento de su hijo. Diferentes estudios han demostrado que en el puerperio se producen también situaciones de hipertiroidismo o hipotirioidiosmo, es decir, una alta o baja actividad de la glándula tiroides. En el primer caso, la mujer se encuentra nerviosa, ansiosa, y actúa por impulsos. En el segundo, se siente apática, cansada, lenta. Todo ello provoca alteraciones evidentes en su comportamiento. Aunque imprevisibles, ya que no todas las mujeres acusan del mismo modo la influencia de los cambios hormonales.

Lo que debés saber de tus hormonas

  • Estrógenos, Progesterona, Testosterona… ¿Qué son?, ¿para qué sirven?, ¿cómo influyen en vos?
    El estrógeno es la principal hormona sexual femenina, y es responsable de muchas funciones.  Es una parte importante de tu ciclo menstrual y tiene mucha influencia en tu funcionamiento general. Pero, no solo se trata de estrógenos. Lo que te sucede también se vincula a la progesterona. Esta es parte de tu ciclo menstrual. Las mujeres también tenemos testosterona (aunque en menor número que los hombres). La testosterona tiene mucho que ver con tus características sexuales, tus huesos y músculos.
  •  Todas las hormonas actúan de manera diferente en cada una de nosotras.
    En las conversaciones con tus amigas habrás comprobado que los síntomas y efectos de las hormonas son diferentes en cada una. Las hormonas son las mismas, pero actúan de manera diferente. Los niveles de estas hormonas suben y bajan cada mes en los ciclos menstruales, pero también varían en función de la edad y de las características de cada mujer… ¡No seguimos una regla! ¡Esto es una clave que los hombres deberían aprender!
  • El Síndrome Premenstrual. ¿Fantasía o realidad?
    Algunos médicos descartan que el síndrome sea real y comprobable. Pero, lo cierto es que muchas mujeres cambian su estado de ánimo y su humor durante este período. Los cambios químicos y hormonales sí son comprobables, e influyen directamente sobre nuestro humor. La mayoría de las veces, los síntomas premenstruales (angustia, desgano, fatiga, pesadez, mal humor, etc) desaparecen una vez que tu período comienza realmente. ¡Puedes sentirte mejor si mantienes tu dieta saludable y practicas ejercicio! Disminuirán tus síntomas, te lo aseguramos.
  • El embarazo produce cambios hormonales, anímicos y físicos.
    Las hormonas y sus cambios son protagonistas de los embarazos. Los niveles hormonales aumentan rápidamente durante el primer trimestre cuando la placenta crece. El estrógeno y la progesterona juegan un papel muy activo. Estas hormonas en realidad desencadenan también a otras hormonas, que producen diversos cambios durante el embarazo, en todo sentido. Las hormonas que participan realmente pueden causar estragos durante este tiempo… ¡Cuidado!
  • Las hormonas afectan el deseo sexual.
    ¿Lo sabías? Ellos deberían saber que los cambios en los niveles hormonales pueden afectar la libido. Las hormonas de las mujeres no ocupan un lugar destacado en una libido saludable, muchas mujeres que sufren de disfunción sexual (falta de deseo sexual y excitación sexual) también han bajado los niveles de estrógeno. Pero, es importante tener en cuenta que estas problemáticas no se deben solamente a las hormonas. Nuestro deseo sexual cambia en el correr del tiempo, con la calidad de vida, con los problemas de todos los días… no somos tan regulares en el apetito sexual como los hombres.

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