Instalar Ubuntu en Windows 10 es una gran manera de obtener lo mejor de ambos mundos. Ubuntu es un popular sistema operativo basado en Linux que ofrece una amplia gama de características y aplicaciones, mientras que Windows 10 es la última versión del sistema operativo insignia de Microsoft. Con la ayuda de Windows Subsystem for Linux (WSL), puedes instalar y ejecutar Ubuntu en tu ordenador con Windows 10. A continuación te explicamos cómo hacerlo:
1. En primer lugar, necesitas habilitar el Subsistema de Windows para Linux (WSL). Para ello, abre el menú Inicio y escribe «Activar o desactivar características de Windows». Selecciona la opción y marca la casilla junto a «Subsistema de Windows para Linux». Haz clic en «Aceptar» para guardar los cambios.
2. A continuación, debes instalar Ubuntu desde Microsoft Store. Abre Microsoft Store y busca «Ubuntu». Seleccione la versión que desea instalar y haga clic en «Obtener». Una vez completada la instalación, puedes iniciar Ubuntu desde el menú Inicio.
3. Ahora que Ubuntu está instalado, necesitas crear una cuenta de usuario. Cuando inicies Ubuntu, se te pedirá que introduzcas un nombre de usuario y una contraseña. Introduce los datos y haz clic en «Crear usuario»
4. Por último, tienes que configurar Ubuntu para que funcione con Windows 10. Abre el terminal de Ubuntu y escribe «sudo apt-get update». Esto actualizará todos los paquetes de tu sistema. A continuación, puedes escribir «sudo apt-get install ubuntu-desktop» para instalar el entorno de escritorio de Ubuntu.
Una vez que hayas completado estos pasos, puedes empezar a usar Ubuntu en tu ordenador con Windows 10. Puedes acceder a todos tus archivos de Windows desde Ubuntu, así como utilizar todas las aplicaciones y características que vienen con él. Instalar Ubuntu en Windows 10 es una gran manera de obtener lo mejor de ambos mundos.