- El primer paso para la limpieza de una mochila es vaciar todo de todos los bolsillos. También hay que dejar todos los bolsillos descomprimidos, desabrochados o con la cremallera abierta, así conseguiremos que se lave también por el interior.
- Busca los códigos que ofrecen instrucciones de lavado y que suelen venir en las etiquetas de la mochila escolar. La mayoría de las mochilas de tela sintetica y o natural se puede lavar a mano o a máquina, pero es muy importante que tengamos claras las temperaturas y los productos químicos que vayamos a usar.
- Hay que quitar todas las correas desmontables de la mochila o piezas de metal si las llevara. Si las correas necesitan limpieza, hay que lavarlas a mano en una solución de detergente líquido y agua tibia. Permite que las correas estén en remojo previamente durante 30 minutos para preparar el tejido, y después frótalas a mano para limpiarlas. Enjuagalas con agua fría y deja secar al aire. No utilices una secadora de ropa, ya que esto podría estropear el material con el que están confeccionadas.
- Si la mochila tiene manchas, utiliza un cepillo suave (cepillo de dientes viejo) humedecido en un detergente líquido diluído en agua con una proporción del 50:50 (Mitad de agua y mitad detergente) para lavar y eliminar cualquier residuo. Antes de utilizar un producto quitamanchas, asegúrate de que no se decolora la mochila probando en lugar poco visible. Si la mancha es de grasa y persistente, prueba con un poco de lavavajillas, eso te lo hará más fácil.
- Coloca la mochila en una vieja funda de almohada y lávala en agua tibia con detergente poco agresivo, utilizando un programa suave de la lavadora o seleccionando el ciclo de lavado a mano (no te olvides de revisar a que temperatura está el termostato, de lo contrario podrías estropear la mochila durante el lavado).
Cuando se termina el ciclo, saca la mochila de la funda de almohada. Usa una toalla vieja para limpiar el interior de la mochila y cada uno de los bolsillos. Permite que la mochila se seque al aire. No la coloques en una secadora y no la expongas a la luz solar directa.
Una mochila debe lavarse una mochila solamente dos o tres veces al año si tiene impermeabilización. El exceso de lavado y detergente pueden disminuir la capacidad de la mochila para repeler el agua.
Si en la etiqueta de la mochila dice que no se debe lavar, puedes limpiar las manchas utilizando una solución de amoniaco perfumado o amoniaco normal diluído en agua, y después repasar con una solución de detergente diluído al 50:50 con agua, tratando de no sobresaturar la tela. "Enjuaga" con un paño blanco limpio humedecido en agua corriente. Secala hasta que no quede detergente ni ningún tipo de resto de productos de limpieza.
Secar al aire, sin secadora y sin exponer a la luz solar directa.
Con estos consejos la mochila estará reluciente y lista para usar en cualquier momento, y te durará más tiempo.
En Ululay, nuestro reto es hacerte feliz, ¿Te lo vas a perder?Publicado el 14/4/2016