Revista África
¿Cómo imaginarme mis próximos días sin los niños, sin Memona y sin Larusi? Y ¿Cómo no pensar en nuestro camión? ¿Cómo estar sin verlo todos los días? Es ya como un miembro de la familia, lo quiero muchísimo.
¿Cómo despertarme por la mañana sin ver a mis niños, estando acostumbrada a verlos todos los días? ¿Cómo llenar ese vacío que voy a tener ahora sin ver a mis niños?
¡Cómo voy a echar de menos a esa gente que me llama todos los días y que ha estado conmigo en todo momento!
Pero el Bubi no termina, al revés, acaba de empezar y seguirá creciendo más y más cada día, cada hora, cada minuto y cada segundo.
Desde los campamentos de refugiados os mandamos un fuerte saludo a todas las personas que habéis apoyado nuestro proyecto, a aquellas personas que han vivido con nosotros lo bueno y lo malo y de los que hemos aprendido tantas cosas que no sabíamos…
Crezcamos juntos como dice Gonzalo. Este año ha sido una experiencia muy buena y muy bonita y espero que sigáis adelante para crecer todos juntos, mano con mano…
Gracias a Memona por soportarme, gracias a Larusi y gracias a todos vosotros por enseñarme.
Gracias
Daryhala