Es cierto que una falda que recuerda a las bailarinas de clásico tiene un punto muy femenino que puede parecer demasiado pasteloso. Pero también es cierto que es mejor respetarlo. O será fácil caer en roqueras de ojos ahumados en modo borrón con botas moteras en actitud "soy una malota que lo flipas". Y no es plan. De las combinaciones más apropiadas para esta falda, destacaremos:
- Con un jersey de punto calado, muy a lo Isabel Marant, que de este modo también le damos ese aire más desaliñado sin pasarnos. Más una bailarina plana, trenzada. Y un bolso midi, de mano.
- Con una blusa de manga corta, de algodón y unas sandalias de suela de madera, con tacón. El bolso, de rafia.
- Con una camiseta de algodón y zapatos planos, de cordones. El bolso, bandolera a un solo hombro.
Seguid tan guapas.
No se te ocurra: lo dicho. Nada de hacer la malota de videoclip. No te creas que estás en un editorial de moda. Nadie te va a decir que te tires sobre las balas de heno, con el pelo hecho un ovillo.
Seda+seda. Mejor mézclalo con otros tejidos naturales como el algodón. Para el invierno también es válido el encaje. Y en verano, con crochet.
Unas zapatillas deportivas. Es como muy novia a la fuga.
Si hace frío, tienes mil opciones estupendas: las cazadoras de piel, gabardinas, las vaqueras, las esmoquin, blazer, una simple chaquetita de punto corta... pero nunca le vayas a meter esas chaquetas de punto grueso, largas.
Si la falda tiene mucho volumen, marca la cintura con cinturones o pañuelos. No te hagas un saco dentro de ella.
Lo encontrarás en: las bailarinas son de Uterqüe.